El Complejo Agroindustrial de Granos Ruta Invasora (CAGRI) de Camagüey, el segundo mayor productor de arroz en Cuba, se ha visto obligado a reajustar la producción de arroz a 52 mil toneladas de las 90, 407 planificadas inicialmente para 2019, informó el oficialista Adelante.
El descenso en la producción es preocupante, si se tiene en cuenta la alta demanda de este producto en la Isla.
El economista cubano Pedro Monreal ha alertado sobre la gravedad del tropiezo productivo en esta provincia del centro de Cuba.
“Se informa sobre una 'caída abrupta' de la producción de arroz en Camagüey, estimándose que solo se llegará a la mitad de lo producido en 2018”, explicó el experto en su cuenta de Twitter.
Monreal ha estimado que las toneladas que ya van de menos “pudiera desbalancear la relación oferta y demanda de un producto básico de amplio consumo como el arroz”.
Además, recordó que el arroz es “el segundo gasto más alto en importaciones de alimentos en Cuba (273 millones USD en 2018)”.
Al parecer, el descenso abrupto se debe a algún problema causado en la cosecha por la escasez de insecticidas, productos que se venden a altos precios en el mercado internacional y que Cuba debe importar.
El medio citado indica como causa del bajón productivo “las limitaciones en la importación del paquete tecnológico” y agrega que “los arroceros camagüeyanos han buscado algunas alternativas ante la escasez de insumos y hoy emplean algunos productos biológicos como el Metarhizium (hongo que ataca a los insectos) y el Fitomag”.
Justo este mayo, productores de arroz en Colombia dieron a conocer su intención de exportar el grano a Cuba.
Con otros productos básicos como el pan de la bodega también han vuelto a surgir problemas graves.
En la oriental provincia de Holguín el pan se estuvo vendiendo en la bodega las últimas semanas "con color negor" y particularmente "duro" porque el molino de Santiago de Cuba está roto y produce una harina con un 40% de granulometría cuando debería tener un 4 u 8%, según indicaron las autoridades luego de que varias denuncias se publicaran en medios independientes, las redes sociales y hasta en la prensa oficialista.
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