Aún quedan pendientes más de 7 mil viviendas dañadas por el huracán Ike en Las Tunas

Este domingo se cumplen 11 años del paso del huracán Ike, uno de los fenómeno meteorológico que mayor devastación ha causado en el territorio de Las Tunas. A la par, en el programa de construcción de viviendas de dicha provincia aún quedan pendientes más de siete mil casos.

Cuando el fenómeno atmosférico penetró en 2008 por la costa norte de la provincia central, los municipios más afectados fueron Jesús Menéndez y Puerto Padre. El resultado final del impacto fue un total de 86 mil viviendas dañadas.

Héctor Rodríguez, director de Vivienda en Las Tunas, declaró en una entrevista concedida a la oficialista Agencia Cubana de Noticias (ACN) que el objetivo es dar respuesta a todos los perjudicados antes de finalizar el 2021.

“Año tras año se ha dado solución a diferentes casos, pero ha sido insuficiente por falta de recursos en ocasiones, en otras por el uso inadecuado, pero también por la ausencia de supervisión de los propios beneficiados, que no han velado por la utilización óptima de los materiales asignados”, subrayó el funcionario.

Sin embargo, ahora, en un intento de poner fin a esta problemática el Gobierno de Las Tunas ha trazado un ambicioso programa anual de viviendas, con la apertura de varios polos en ocho municipios. En lo que va de año, 337, de los 600 inmuebles construidos por vía estatal, han estado dirigidos a las familias afectadas por la tormenta.

Reportes del ACN indican que el proyecto “incluye la producción de materiales con recursos locales, entre ellos ladrillos de barro, bloques, elementos para pisos, conexiones plásticas para instalaciones hidráulicas, así como también áridos y el procesamiento de cemento de bajo carbono”.

El último polo inaugurado por el Gobierno provincial está ubicado en la carretera que comunica con el municipio de Jobabo. Este, a su vez, cuenta con unas mil 700 moradas de diferentes tipologías. También incluía, en un primer momento, un edificio del sistema educacional pero nunca llegó a terminarse.

Las ineficientes acciones del régimen tras el impacto de fenómenos naturales ha sido materia de constantes denuncias por parte de los isleños.

Algo similar ha ocurrido con las familias afectadas por el tornado que devastó, el pasado 27 de enero, varias barriadas de la capital. La prominente -e inesperada- columna de aire dejó un saldo total de 8.319 viviendas afectadas, de ellas 1.068 derrumbes totales. De estos daños, hasta el momento y según fuentes oficiales, solo se ha podido recuperar un 80%.