Vídeos relacionados:
En una jornada de lunes sin muchas pretensiones para la delegación cubana en Lima 2019, cinco niñas disfrutaron su presentación en el Polideportivo Villa El Salvador para alcanzar una presea de bronce que corona los incontables sacrificios que realizan diariamente para cumplir sus sueños de brillar dentro de la gimnasia rítmica.
Después del cuarto lugar del sábado en la modalidad de conjuntos general, cuando con 42.450 puntos las jóvenes quedaron a menos de una unidad de Brasil, parecía que cada una de las exponentes de esta disciplina regresaría a la Isla sin premio de consuelo. Además, no pocas personas vieron algo de injusticia en el acumulado de esa prueba, entendiendo que la presentación de las caribeñas fue superior a las de las sudamericanas.
Lo más leído hoy:
Parecía, entonces, que la travesía limeña llegaba a su fin 48 horas antes de lo pactado.
Sin embargo, y lejos de amilanarse, las chicas de la experimentada entrenadora Nely Ochoa salieron el lunes al tapiz en la prueba de conjunto (3 aros y 2 pares de mazas) con la firme convicción de cumplir sueños en realidades.
Melissa Kindelán, Danay Utria, Tatiana Rodríguez, Elaine Rojas y Claudia Arjona lograron una de las mejores ejecuciones de sus vidas y rememoraron las rutinas de estelares como Lourdes Medina o Yordania Corrales, que son nombres mayores cuando se trata de gimnasia rítmica cubana.
Las competidoras de Cuba brillaron hasta hacerse con las medallas de bronce, tras conseguir una calificación de 22.200 y ubicarse solo por detrás de Brasil (24.250) y México (23.050) en un podio latinoamericano.
Esta vez, ni Estados Unidos ni Canadá lograron colarse en la fiesta, lo cual habla claramente de la calidad evidenciada por las nuestras.
Así, este deporte igualó el resultado logrado en Toronto 2015. Aquella vez, Arjona y Kindelán se unieron a Zenia Fernández, Martha Pérez, Adriana Ramírez y Legna Savón para ubicarse en el tercer lugar de la prueba general.
Además de la presea, las chicas sumaron la clasificación a la prueba del all around de su única representante individua, Gretel Mendoza, quien concluyó en el decimocuarto escaño y séptima en la final de aros, con 15.300 puntos.
Con el cierre del deporte, se puede decir que el objetivo -que no era ni ambicioso ni utópico-, se cumplió: Cuba mantuvo su presencia en los podios continentales, si bien se conoce que está lejos de la élite mundial y que muchos detalles deben perfeccionarse.
Archivado en: