La ciudad de Hialeah aprobó una ordenanza urbanísticas más restrictiva donde limita la cantidad de tráilers y botes que se pueden tener en una casa.
El uso de vehículos recreativos para alquilarlos como viviendas en zonas residenciales es ilegal en Hialeah y está afectando el orden urbano en la "Ciudad que Progresa".
El alcalde Esteban Bovo había advertido desde septiembre, que las autoridades pondrían un freno a esta situación. Este miércoles ofreció una conferencia de prensa asegurando que ya hay nueva normativa y la multa es grande para quienes incumplan lo establecido.
"El alquiler de una casa móvil en una zona residencial para lucrar es ilegal. No se permite", dijo Bovo. La multa por incumplir la nueva normativa es de 500 dólares diarios.
La nueva ordenanza tiene el objetivo de proteger a los propietarios en Hialeah. Muchos vecinos se quejan por tener que vivir cerca de casas rodantes alquiladas ilegalmente por personas que no conocen y que en algunos casos tienen comportamientos incívicos.
Un alquiler de este tipo puede costar 1,100 dólares al mes. Es la opción de vivienda que tienen los inmigrantes recién llegados al país que poseen bajos ingresos.
Las autoridades de la ciudad han detectado casos de hasta cinco tráilers en una sola propiedad, en medio de una zona residencial. "Eso no podemos tolerarlo", dijo el concejal Jesús Tundidor.
Las nuevas restricciones señalan que solo se puede tener un vehículo recreativo o bote por propiedad. Además, prohíben el estacionamiento del tráiler en el patio trasero de la vivienda y lo aceptan solo en casas unifamiliares.
No se conoce la cantidad exacta de casas rodantes que hay en Hialeah y que se usan ilegalmente como viviendas, pero las autoridades estiman que la cifra supera los 198 vehículos recreativos registrados legalmente.
Las autoridades de Hialeah iniciarán un proceso de registro de las casas móviles. Los propietarios deberán firmar un documento donde se comprometen a que el uso será recreacional y no para lucrar con alquileres.
En la votación de la ordenanza participaron siete concejales, de los cuales cinco estuvieron a favor y solo dos en contra.
Los que se opusieron están preocupados por el impacto que esta medida tendrá para familias necesitadas, sobre todo en los casos donde faltan planes de ayuda social.
Los propietarios de tráilers tienen un periodo de cuatro meses para registrarlos. Si las autoridades detectan que alguna casa rodante usa cables para aprovechar el servicio eléctrico público o se conectan al alcantarillado, podrían serán multados.
El alcalde señaló que la ordenanza no afectará a los vehículos comerciales.
En Miami-Dade las autoridades han tomado nota de la forma en que Hialeah está resolviendo esta situación y podrían aplicar medidas similares.
¿Qué opinas?
VER COMENTARIOS (1)Archivado en: