Vídeos relacionados:
La falta de yeso ortopédico en los hospitales cubanos sigue siendo crítica y continúan proliferando los inventos para sustituir el material ante cualquier fractura.
Recientemente, un cubano de Guantánamo denunció que los médicos debieron inmovilizar una pierna con cartón ante la falta de insumos en el país, según trascendió en un post de Facebook de José Antonio Ochoa.
Lo más leído hoy:
Según relató en su texto, una amiga suya tuvo una fractura de tobillo y con cartón le fijaron la pierna.
"Please, alguien de Guantánamo que pueda hacer el gran favor, y obvio tenga que ver con salud pública, que se ponga en contacto con esta chica que es una amiga mía y está pasando por un terrible dolor debido a una fractura de tobillo y para colmo en las instituciones pertinentes le ponen una gran innovación a base de cartón", dijo en el post.
Su allegada, identificada en redes Dianelis Frómeta Fanego, también compartió en sus redes anuncios de compra de yeso para resolver su estado y contribuir a que su pierna sane correctamente, pues el cartón no logra inmovilizar completamente el área fracturada.
"Yo estoy seguro de que sí hay material de yeso, lo que pasa es que no hay para mi gente del pueblo, no, para ellos es p y cepillo", añadió José Antonio Ochoa.
Los comentarios a su denuncia y los casos trascendidos en toda Cuba exponen un problema que atenta contra la recuperación de los pacientes víctimas de roturas de sus extremidades.
"Así mismo está una amistad mía en Caimanera hace 4 meses y no se le cura el tobillo aún por el invento ese de ellos", añadió una internauta.
Alambres y cartones son los materiales más usados como solución ante el déficit de yeso ortopédico en los hospitales cubanos.
Esta crisis obliga a los pacientes a pagar a elevados precios en el mercado informal la escayola que se utiliza para inmovilizar las extremidades afectadas.
Una joven cubana que fue víctima de una fractura en un pie denunció que además al indagar por el precio de un yeso en el mercado negro se enteró que cuesta 4,500 pesos, monto que superaba su salario de 3,700 CUP como ingeniera.
Archivado en: