El régimen cubano está a punto de concluir una fábrica procesadora de moringa en la provincia de Sancti Spíritus a la que ha destinado 18 millones de pesos.
Yamilee Gómez Mesa, directora de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Comercializadora de Productos Agropecuarios, de la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro, dijo a la Agencia Cubana de Noticias que la obra se encuentra a más del 90% de ejecución, y que ya fueron empleados 11 millones de pesos, de los más de 18 millones previstos.
Afirmó que en próximas jornadas iniciará la instalación del equipamiento, que incluye tecnología procedente de Austria para extraer polvo con "alto valor proteico" de la planta de moringa.
Gómez Mesa precisó, además, que el 80% de la energía eléctrica a utilizar en la planta será generada por paneles solares fotovoltaicos que cubrirán, fundamentalmente, la demanda del horno de secado.
La planta "tiene capacidad para procesar anualmente 20 toneladas de hojas de la moringa para lograr el polvo, a partir de un proceso de secado de esta parte del árbol de diversas propiedades nutritivas y terapéuticas, originario de la India", detalló el medio de prensa.
Dijo, además, que estará localizada en la Empresa Sur del Jíbaro, uno de los polos arroceros de Cuba.
El polvo de la hoja de moringa se utilizará con fines farmacéuticos, como complemento nutritivo en la industria alimentaria y para la exportación, comentó por su parte Jorge Enrique Díaz Vidaurreta, especialista y futuro administrador de la nueva instalación.
Agregó que se trata de "un producto muy cotizado en el exterior por sus múltiples aportes".
Sobre el árbol de moringa dijo que se destinarán a la siembra del mismo 13 hectáreas, de las cuales ya hay tres preparadas.
Julio Bismar Hernández Vázquez, primer secretario del Partido Comunista de Cuba en La Sierpe, afirmó que "es un orgullo y un compromiso materializar una idea del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien impulsó el programa arrocero de La Sierpe y desarrolló valiosos estudios sobre la moringa y otras plantas proteicas".
En Pinar del Río y Santiago de Cuba también se construyen plantas para el procesamiento de la moringa, que según el gobierno cubano es un "árbol milagroso" con más de 35 minerales, vitaminas, antioxidantes y aminoácidos esenciales para la vida, incluyendo algunos como la arginina y la histidina, que se encuentran generalmente en proteínas de origen animal.
En mayo pasado el gobierno cubano hizo un llamado urgente a sembrar moringa y otras plantas forrajeras para alimentar al ganado mayor, ante la imposibilidad de comprar pienso en el mercado internacional.
Sin embargo, en diciembre de 2021 las empresas agrícolas cubanas incumplieron su plan de siembra de moringa y otras plantas forrajeras proteicas que sirven para alimentar a los animales.
En marzo, Cuba firmó con Venezuela un acuerdo para impulsar el cultivo de la moringa como parte del proyecto de "soberanía alimentaria" de ambos países.
Asimismo, el año pasado trascendió que el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) de Cuba y el Grupo BioCubaFarma había aprobado la introducción de pastillas de moringa en el tratamiento a los pacientes con coronavirus.
La moringa ganó relevancia en la isla como parte de los últimos delirios del dictador Fidel Castro, quien pasó los últimos años de su vida fascinado con la idea de que Cuba estaba preparada para volcarse en la producción masiva de la "planta milagrosa" por ser, según sus propias palabras, "fuente de carne, huevo, leche y fibras de seda".
Su propuesta para el estudio de los árboles "moringa oleifera" como alternativa para "la alimentación y el empleo sano" quedó plasmada en sus artículos de la serie "Reflexiones".
También trascendieron imágenes suyas presumiendo, ya muy anciano, sus plantaciones; y CiberCuba conoció entonces que incluso distribuía paquetes de moringa, por ejemplo, a los periodistas que por aquella época trabajaban en el portal Cubadebate.
Sin embargo, cuando el gobierno anunció que la moringa sería distribuida a la población como suplemento sustituto de carne y huevos, los cubanos respondieron, cuando menos, con una canción que, si bien resumía sus milagrosas propiedades, concluía: "no voy a negar que la grasa y la empella yo, la cambié por la moringa; pero el filete, el lomo y la pierna no, que moringa de que pin... ".
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