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Ricardo Alarcón de Quesada, figura de la alta jerarquía del régimen cubano hasta 2013, falleció este sábado en La Habana, a los 84 años.
La noticia la dieron a conocer fuentes familiares y la confirmó la viceministra de Relaciones Exteriores, Josefina Vidal a través de su cuenta en Twitter.
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"A Ricardo Alarcón de Quesada, el maestro de los diplomáticos de nuestra generación, le guardaremos siempre profundo respeto, admiración e infinito afecto. Gracias por el privilegio y el honor de haber sido sus discípulos. Nuestras sentidas condolencias a Margarita y Ricardito", escribió Vidal.
No se revelaron hasta el momento las causas del fallecimiento. Su salud se había deteriorado en los últimos meses y estuvo ingresado al menos en una ocasión con afecciones respiratorias y renales. Recientemente se le había extirpado un riñón.
Informaciones proporcionadas a CiberCuba por fuentes de su entorno familiar indican que murió a las 11 p.m. de este sábado en el CIMEQ, en La Habana.
Alarcón de Quesada, nacido en La Habana en 1937, participó en la lucha contra el dictador Fulgencio Batista. En 1959 fue elegido vicepresidente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), como parte de la candidatura encabezada por el comandante Rolando Cubela, que derrotó a la del Movimiento 26 de Julio, encabezada por Pedro Luis Boitel.
Dos años más tarde, alcanzó el máximo cargo de la FEU y posteriormente se convirtió en secretario de Relaciones Exteriores de la Unión de Jóvenes Comunistas. Desde ahí saltó a una larga carrera diplomática, en la que destacan su cargo de ministro (1992-93) y su desempeño, durante 12 años, como Embajador de Cuba ante Naciones Unidas, en Nueva York, donde llegó a ser presidente del Consejo de Seguridad de la ONU (1990-91), vicepresidente de la Asamblea General y titular del Consejo de Administración del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Durante 20 años (1993-2013) asumió el cargo de presidente del Parlamento cubano. En su mandato negoció con las autoridades estadounidenses el fin de la "crisis de los balseros" y llegó a un acuerdo migratorio con el presidente Bill Clinton.
Hombre de la máxima confianza política de Fidel Castro, protagonizó dos polémicas públicas de relieve: su debate con el también fallecido Jorge Mas Canosa, en 1996, y su discusión con el entonces estudiante de la UCI, Eliécer Ávila, en 2008.
En 2012, su asesor, Miguel Álvarez, fue arrestado y condenado por supuestos actos de espionaje ante un tribunal militar, lo que se consideró un factor vinculado a la salida de Alarcón de la presidencia del Parlamento.
Le sobreviven su hija Margarita Alarcón Perea y su nieto Ricardo; su esposa, Margarita Perea Maza, murió en 2008.
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