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Un total de 38 migrantes de diferentes nacionalidades, entre ellos al menos ocho cubanos, han sido devueltos a la frontera sur de México, a pesar de contar con documentos migratorios expedidos por las autoridades migratorias de ese país.
Los migrantes, que ya habían tramitado con éxito Tarjetas de Visitantes por Razones Humanitarias (TVRH), Formas Migratorias Múltiples (FMM) e incluso solicitudes de refugio, denuncian “que las autoridades los están deteniendo en el último puesto de revisión que está en Piedras Negras, Coahuila, y son enviados a Tabasco o San Luis Potosí”, en declaraciones recogidas por un periódico local.
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A medio kilómetro de la frontera norte, según el relato del migrante venezolano Ricardo Gómez, las autoridades mexicanas interceptaron a un grupo de ocho cubanos junto a los que viajaba, les retiraron sus documentos y, luego de mantenerlos encerrados en un establecimiento migratorio durante 38 horas, los devolvieron al lugar donde ya habían pasado meses intentado obtener la documentación migratoria.
Ante sus reclamos, se limitaron a explicarles que “migración del Sur no es lo mismo que en el Norte”. Los migrantes fueron primero trasladados a San Luis Potosí, donde pernoctaron tres noches, para finalmente ser reubicados en Tapachula.
Raúl N., un migrante cubano, explicó que él fue detenido con 30 personas entre cubanos y venezolanos, quienes contaban con la Forma Migratoria Múltiple (FMM), la cual les permite transitar durante 180 días por el territorio mexicano. Cuenta que las autoridades les rompieron los documentos y los regresaron a Tapachula.
Cuando ha intentado volverlo a tramitar en Tapachula, los funcionarios de migración le han explicado a Raúl N. que el documento les fue entregado debido a las protestas que realizaron durante la visita al lugar del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, y que actualmente no se está expidiendo.
“Nosotros queremos hacer las cosas bien, pero si las autoridades no nos dejan otra opción nos vamos a unir a las movilizaciones y a la caravana que está programada que salga de Tapachula”, comentó Raúl N. a Diario del Sur.
Con anterioridad, migrantes cubanos han denunciado que, en distintos puntos de su trayecto, las autoridades mexicanas piden dinero a quienes transitan rumbo a la frontera norte para dejarlos avanzar, a pesar de contar con la documentación migratoria.
El pasado mes de marzo, 32,000 cubanos arribaron a la frontera sur de Estados Unidos, cifra que duplica la del mes anterior. Esta alarmante oleada migratoria comienza a ser comparada con el éxodo del Mariel en 1980.
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