Los cubanos sufren escasez de combustible y se repiten otra vez las largas colas para comprar gasolina y petróleo en La Habana.
Un cubano afectado por la situación envió imágenes a CiberCuba en las que se observa la inmensa cola del servicentro de Zapata y 4. La fila llega hasta la calle 14 y solo venden 20 litros de gasolina especial por carro.
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Las colas duran largas horas. Comenzaron desde el domingo, pero se agudizaron el lunes tras amanecer varios servicentros del país sin combustible. Los cubanos aseguran que viven una crisis en bucle y que el Período Especial es un fantasma que no los abandona.
El domingo el periódico Girón de Matanzas informó la restricción en la venta de combustible a las personas naturales, es decir, a los particulares. No especificaron si la medida era de carácter nacional, pero en La Habana tampoco hay gasolina especial, ni regular ni diésel en los servicentros.
Geobel Quintero, coordinador de programas del gobierno provincial de Matanzas, aseguró que no se trata de desabastecimiento sino de dificultades en la distribución y que el problema era "transitorio".
“Para la venta en depósitos autorizaremos hasta 10 litros de gasolina y 20 en de diésel. En el caso de que usted vaya a echarlo directo al tanque del automóvil serían 20 litros de gasolina y de diésel hasta 40”, indicó el funcionario.
Quintero dijo que Transcupet, solo tiene el 62% de sus camiones de reparto y no puede proveer combustible a las estaciones de servicio porque debe priorizar la entrega del mismo en los grupos electrógenos, que el gobierno considera "en extremo necesarios en estos momentos a causa de la crisis energética temporal que sufre el país".
El miedo a quedarse sin combustible hizo que muchos conductores fueran el domingo a comprar su gasolina o diésel en La Habana.
El lunes la ciudad amaneció con servicentros desabastecidos completamente y se cree que algunos estarán un tiempo cerrados.
Reuters citó comentarios de Jorge Piñón, profesor en política energética y experto de la Universidad de Texas, quien considera que el problema de suministro de combustible de Cuba se debe a la disminución en su producción nacional, la capacidad de refinación limitada y la dependencia de Venezuela.
"El desafío actual de combustible de Cuba es el resultado de la baja producción de las refinerías y su incapacidad para comprar (con efectivo) gasolina y diésel en los mercados petroleros internacionales para complementar sus entregas de petróleo venezolano, debido a los altos precios", dijo Piñón.
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