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La policía de Miami-Dade informó que más de un centenar de personas han sido multadas en el condado por romper las medidas de prevención del coronavirus, como el uso obligatorio de máscaras faciales y el distanciamiento social.
De acuerdo con el reporte, desde el sábado fueron citadas 115 personas que deberán pagar una multa civil de $100 dólares, iniciativa aprobada por las autoridades locales, informó el diario Local 10.
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Este domingo el alcalde Carlos Giménez dijo en el programa Good Morning America de ABC que la nueva multa civil se aplicará a quienes no usen las máscaras o incumplan las reglas de distanciamiento.
La sanción se aplica por incumplimiento de la Enmienda No. 1 a la Orden de Emergencia 20-20, aprobada el 2 de julio, según la cual "todas las personas en todo el condado de Miami-Dade deberán usar una máscara u otra cobertura facial cuando estén en público".
Otra medida aprobada por Giménez son las multas de $500 dólares a los negocios que no cumplan las normas de distanciamiento y ocupación. Los que reincidan en estos errores serán clausurados por disposición oficial.
"La primera noche creo que tuvimos unas 35 personas multadas, y cerramos algunos negocios. Esto va a a aumentar a medida que más inspectores estén en funcionamiento", subrayó.
El director de la policía de Miami-Dade, Freddy Ramírez, explicó que las nuevas multas se aplican a través de una citación civil, no son consideradas un delito penal, "porque no queremos criminalizar; lo que queremos es cumplimiento", subrayó.
El sábado el alcalde también adelantó a las 08:00 de la noche el toque de queda decretado hace casi un mes en el condado, el más afectado por el coronavirus en Florida.
Las normativas citadas responden a la urgencia de detener la acelerada curva de contagio en el estado, que este domingo contabilizó 12 478 casos nuevos de COVID-19 en 24 horas, y un total de 350 047 desde que comenzó la pandemia.
De esa cifra Miami-Dade tuvo 3 212 diagnósticos positivos desde el sábado y ahora tiene un total de 84 238 casos registrados.
Lo más preocupante ahora es la baja disponibilidad de camas en los hospitales, uno de los temas que más inquieta al personal sanitario y a la población en general.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha asegurado que existe una disponibilidad de camas del 21 por ciento.
Este domingo Estados Unidos registró una trágica estadística al alcanzar las 140 000 muertes por coronavirus, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
Los números se aceleraron tras la apertura de las ciudades en junio, pues desde entonces están falleciendo unos 5 000 pacientes semanales como promedio.
En las ciudades más golpeadas del país, las autoridades se están quedando sin espacio para almacenar cuerpos, ya que las morgues están repletas.
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