Estados Unidos superó este miércoles los 3 millones de casos confirmados de coronavirus, al tiempo que aumentan las preocupaciones en el país ante un posible desbordamiento de la capacidad hospitalaria.
La nación norteamericana acumula, en total, 3 016 515 de personas contagiadas y 131 666 fallecidos desde el inicio de la crisis sanitaria, mientras que la cifra de recuperados llega a 936 476. Con tales números, EE.UU. es hoy, por amplio margen, el país más golpeado por la pandemia en todo el mundo.
Los expertos estiman que probablemente la cantidad de muertes aumentará tras los recientes picos de casos en muchos estados, entre los que se halla Florida. En los primeros siete días de julio, 18 estados han reportado aumentos récord de nuevos casos de COVID-19, informa un despacho de Reuters.
En sólo dos semanas, el número de pacientes hospitalizados se duplicó en Texas. Las autoridades de Austin advirtieron días atrás que los centros sanitarios de esa ciudad podrían colmar su capacidad en las próximas jornadas y quedarse sin camas en la unidad de cuidados intensivos (UCI) en un plazo de 10 días.
Cerca del 90% de las camas UCI en Arizona están ocupadas al tiempo que el virus continúa propagándose. La situación trastoca la vida de los estadounidenses que ya vieron opacadas sus celebraciones del 4 de julio al cancelarse espectáculos en diversos pueblos y ciudades con el fin de evitar las aglomeraciones.
A finales de abril, Estados Unidos sobrepasó el millón de casos confirmados de coronavirus, una cantidad a la que solo ha llegado Brasil. Bastaron 2 meses para que la cifra se duplicara y otro más para triplicarse.
En medio de la crisis internacional de la pandemia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que su país dejará de pertenecer a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2021.
Este miércoles, además, el estado de Florida reportó 9.989 nuevos casos de COVID-19. Los condados de Miami-Dade y Monroe tuvieron la mayor cantidad de contagios sumados en un solo día. Miami-Dade, en consecuencia, cerrará el servicio en restaurantes a partir del jueves. Por otro lado, Broward elabora una nueva orden de emergencia y Monroe prevé medidas de protección adicionales a las que actualmente aplica.
Otros estados como Nueva York que, en un comienzo, se convirtieron en el epicentro de la enfermedad, dispusieron que los viajeros procedentes de otros territorios considerados puntos calientes por el índice de infección, tuvieran que someterse a un aislamiento de 14 días cuando ingresaran al territorio.
Las cifras tampoco son halagüeñas en otras naciones que experimentan ahora un aumento considerable. Entre ellas, La India, que este miércoles registra 742 417 de personas infectadas y 20 642 víctimas fatales. En la región de las Américas, Perú y Chile sobrepasaron los 300 000 contagios. Brasil, el país más afectado después de EE.UU. en el mundo, acumula 1 668 589 de casos confirmados y 66 741 muertos.
Rusia suma hasta el momento 699 749 contagios y 10 650 fallecidos, de acuerdo con los datos de la universidad estadounidense Johns Hopkins. A fines de junio, la Unión Europea, atendiendo a varios índices sanitarios, excluyó a los estadounidenses y los rusos, entre otros, de la relación de visitantes que el bloque comenzó a recibir a partir del 1 de julio, cuando sus fronteras reabrieron tras varios meses de restricciones por la pandemia.
La lista ha generado tensiones entre los socios europeos, que han expresado desacuerdos sobre quiénes recibir atendiendo a sus intereses particulares. Antes de que la pandemia azotara al mundo, los ciudadanos de 105 países podían entrar con visado en la zona Schengen. Y los de otros 67 países incluso podían ingresar sin requerir visado.
Estados Unidos, Rusia, Brasil, México o India, representan importantes fuentes de un mercado turístico europeo que, en 2018, según datos de Eurostat, registró la entrada de 168 millones de personas de fuera de la UE y un total de 512 millones de pernoctaciones hoteleras.
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