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El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel se refirió veladamente a una vuelta a la vida normal en el país, durante su intervención el pasado sábado en la reunión del grupo creado para la prevención y el control de la pandemia de coronavirus.
“No podemos ganar en confianza, al contrario (…), hay que seguir evaluando las insuficiencias que tenemos para, en el menor tiempo posible, ir regresando a la normalidad”, afirmó.
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Acerca del tema, Díaz-Canel comunicó que en una reciente sesión del Consejo de Ministros se tomaron “un grupo de decisiones con relación a la planificación de la recuperación, y a todo lo que en el futuro y en el presente más cercano realizará el país para también enfrentar la crisis económica asociada a esta pandemia”, sin dar más detalles.
Al analizar los datos del Ministerio de Salud Pública que muestran la incidencia de la pandemia en el país durante la semana que acaba de concluir, el mandatario se vanaglorió de que durante varias jornadas el número de casos diagnosticados fue inferior al de los pacientes curados.
“…durante siete días consecutivos se sucedieron más salidas que entradas al sistema de Salud”, dijo.
“Disminuyeron en 183 los pacientes activos, o sea los que estaban ingresados para ser atendidos, lo cual le ha ido quitando carga a nuestro sistema de instituciones de Salud”, añadió.
Acerca del tema económico, no aportó más elementos.
En la reciente sesión extraordinaria del Consejo de Ministros a la que hizo referencia el gobernante, efectuada el viernes anterior, el viceprimer ministro Alejandro Gil Fernández informó que el impacto de la pandemia obligó a aprobar recientemente un ajuste al Plan de la Economía previsto para este año, según una nota publicada por el diario Granma.
Gil apuntó que el país podría comenzar la etapa de recuperación en los próximos meses, pero recalcó que el proceso no será de un día para otro y abarcará varias fases, la primera de las cuales comprenderá la reapertura de servicios y actividades en la Isla, manteniendo las medidas de prevención contra el virus.
La información de Granma no aporta elementos concretos y deja más dudas que respuestas en cuanto a una futura reapertura de la actividad económica, que la gran mayoría ve muy lejana, dados los índices de contagios y muertes por coronavirus en Cuba. Según los datos del Ministerio de Salud Pública de este domingo, actualmente hay 1.776 pacientes confirmados y 77 fallecidos.
El régimen mantiene su habitual costumbre de ocultar información relevante a la población. Esta misma semana una información periodística que abordaba precisamente los ajustes económicos aprobados por el Consejo de Ministros, desapareció extrañamente de los medios oficialistas del país.
El texto eliminado, titulado ‘Consejo de Ministros aprobó ajustes al Plan de la Economía de 2020 e indicaciones para 2021’, versaba originalmente de un planteamiento de Díaz-Canel acerca de implementar más rápidamente varias cuestiones pendientes en la Conceptualización del Modelo Económico y Social, como el redimensionamiento del sector empresarial y del privado.
Desde antes de la pandemia de coronavirus la economía cubana ya estaba severamente deteriorada. Con el cierre del turismo, responsable de aportar gran parte de los ingresos al régimen, en un escenario agravado por el hostigamiento de la administración estadounidense, el gobierno anunció que considera adoptar medidas tomadas durante el período especial.
Por otra parte, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) pronosticó en abril pasado que la economía de la isla caería un 3,7 por ciento en 2020, debido a los efectos globales de la pandemia del coronavirus.
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