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La Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (OAAR) canceló la construcción de una templo bautista en la localidad de Fomento, Holguín.
La denuncia fue presentada por la organización Solidaridad Cristiana Mundial (CSW, por sus siglas en inglés) el pasado viernes, en su sitio web. Según indicaron, la Iglesia Bautista de Maranatha llevaba dos años intentando levantar una edificación para poder celebrar sus servicios religiosos.
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“Estamos muy preocupados por la situación de la Iglesia de Maranatha en Holguín, es una iglesia bautista histórica”, indicó a Radio TV Martí, Anna-Lee Stang, vocera de la organización.
La congregación, perteneciente desde 1947 a la Convención Bautista del Este y con más de 700 fieles, ha tenido que invertir un aproximado de 1.500 dólares en trámites burocráticos para gestionar un permiso de construcción, avalado por la Dirección Provincial de Justicia, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente y el Departamento de Planificación Física.
En 2017 este autorizo fue entregado a la entidad religiosa tras un “difícil y costoso” proceso, obstruido -en la mayoría de las ocasiones- por los funcionarios de las entidades gubernamentales.
Sin embargo, el pasado mes de abril le fue notificado a los líderes de la iglesia la cancelación de dicho permiso, cuya fecha de vencimiento es a principios del 2020, hasta próximas reuniones del Consejo de Ministros en la capital del páis.
"Lo peor de todo es que, después de tanto esfuerzo, en este punto nos comunica a través de nuestro presidente [denominacional], que el permiso otorgado en febrero de 2017 se cancela hasta que el Consejo de Ministros en La Habana se reúna y evalúe nuestro caso nuevamente, un proceso que puede llevar algún tiempo”, explicó Amado Ramírez Oliveros, pastor de la Primera Iglesia Bautista.
“Esto demuestra una gran falta de respeto ya que el permiso original provino precisamente de las mismas autoridades más altas del país. Esta es una contradicción que no entendemos", agregó.
La congregación de Fomento lleva en la mirilla del régimen comunista desde mayo de 2015, cuando le intentaron confiscar los bienes a la iglesia. Sin embargo, una campaña ejecutada desde dentro y fuera de la Isla no permitió que esto sucediera.
"El uso de las burocracias gubernamentales y los interminables requisitos para los permisos que pueden cancelarse arbitrariamente en cualquier momento es típico de la forma en que el gobierno cubano busca controlar y restringir la libertad de religión o de creencias en la Isla”, señaló Anna-Lee Stangl, una de las directivas de CSW.
“El liderazgo de la Iglesia Bautista de Maranatha y la Convención Bautista del Este han hecho todo bien y han cumplido con todos los requisitos del gobierno. A cambio, la Oficina de Asuntos Religiosos, una vez más, ha actuado de mala fe y los ha sometido a una prueba kafkiana, donde se encuentran justo donde empezaron hace más de dos años”.
A raíz de los sucedido, la CSW realizó un llamado al Gobierno de Miguel Díaz-Canel para que el Estado “simplifique y aclare los procesos” por los cuales las asociaciones religiosas tienen que transitar para construir o reparar sus inmuebles.
"Al mismo tiempo pedimos que ORA sea transformada para que los grupos religiosos ya no sean rehenes de estas decisiones arbitrarias y manipuladoras", concluyó Anna-Lee Stangl.
En su más reciente informe sobre Libertades Religiosas, el Departamento de Estado de la Casa Blanca indicó que el Partido Comunista (PCC) continúa controlando la mayorías de los aspectos de la vida espiritual en el país, a través de la OAAR.
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