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En su informe más reciente, la organización Cuban Prisioners Defenders (CPD) ha dado a conocer que alrededor de miles de inocentes van a las cárceles cubanas por motivos políticos.
CPD ha explicado que existen en la Isla actualmente dos categorías de presos políticos, aquellos que pertenecen a grupos opositores al régimen cubano y aquellos críticos al poder que son condenados por razones de conciencia, aunque no pertenezcan a ninguna asociación política.
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La organización advirtió que, hasta 2019, el primer grupo de prisioneros políticos “era el único que tenía visibilidad internacional, y es en el que la represión es más virulenta y salvaje”.
“Sin embargo, es el segundo grupo el que es mucho más importante en número” y contra el que “se ejerce una mayor capacidad represora temprana", agrega el reporte.
CPD se refiere a un grupo de presos alrededor de los cuales empezó a investigar desde finales de 2018. Según dice el informe, estos prisioneros son los llamados por las instancias represoras del Gobierno Cubano “antisociales”, y se les acusa habitualmente de “peligrosidad social pre-delictiva” y son sentenciados con “medidas de seguridad pre-delictiva”.
Estas condenas impuestas por el régimen en Cuba representan “la gran arma represiva y disuasoria para la población crítica al gobierno”, alertó la organización.
La lista de presos políticos de CPD no ha aumentado en estos últimos 30 días con respecto al mes anterior, aunque denuncian que los métodos represivos siguen siendo igual de feroces e incluso se teme que el Gobierno esté usando una “estrategia de expatriación” como nuevo modo de ejercer presión contra los ciudadanos.
"No hemos comprobado cambios en la represión ni los abusos relacionados con estos en el mes de mayo. Más bien al contrario, sigue siendo feroz, atroz y descontrolada por parte de las fuerzas de la Seguridad del Estado, aunque se viene detectando una estrategia adicional de expatriación forzosa mediante amenazas y golpizas".
El reporte asegura que el régimen está expatriando de manera forzosa a prisioneros de conciencia y políticos para no aumentar la lista de estos frente a varias organizaciones de la sociedad civil dentro y fuera de Cuba.
"Resulta evidente que la presión por bajar el número de presos políticos de la isla, que estamos ejerciendo múltiples sectores de la sociedad civil en la Isla y fuera de ella, han hecho que el régimen, más que nunca, instaure una política de expatriación forzosa para los críticos más activos y que serían objeto de necesaria prisión de conciencia para detener su actividad", denunció.
En febrero, Eliecer Góngora Izaguirre, coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), en un municipio de Las Tunas, fue desterrado de Cuba y enviado a Guyana, después de ser sacado violentamente de su casa, donde vivía con sus cuatro hijos.
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