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La estancia del presidente Miguel Díaz-Canel en Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU está dejando noticias no solo por su discurso ante Naciones Unidas, sino por su agenda de eventos y reuniones que están dado mucho de qué hablar.
Una de las imágenes recientes que más debate ha desatado en la redes es la del encuentro entre el dirigente cubano y Hugo Cancio, dueño de OnCuba.
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El encuentro con Cancio tuvo lugar en la sede de la Misión de Cuba ante las Naciones Unidas, donde el presidente se reunió con cubanos emigrados y negó que los ciudadanos de la Isla emigren de forma masiva.
"Los cubanos viajamos de manera creciente, no emigramos de manera masiva", indicó durante el acto en Estados Unidos, país al que llamó "territorio oficialmente hostil".
La escena no ha pasado desapercibida ante quienes recuerdan las declaraciones que hizo Díaz-Canel en febrero de 2017, cuando el entonces vicepresidente explicó que entre los planes del gobierno cubano estaba el cierre de la plataforma digital OnCuba, aunque eso implicara asumir la etiqueta de censuradores.
"Que se arme el escándalo que se quiera armar, que digan que censuramos, todo el mundo censura", afirmó durante una reunión de la llamada "Escuela de Cuadros" del Partido Comunista.
En aquel encuentro, que fue difundido en agosto de 2017 por el grupo opositor Estado de Sats, también alertó de la aparición de sitios, portales y revistas "aparentemente inofensivas y de perfil bajo", a los que acusó de "difusión de estereotipos probados de guerra cultural".
Además Díaz-Canel denunció la existencia en el territorio cubano de "una avalancha de propuestas y proyectos con contenidos subversivos que todos los días se están analizando", entre los que citó las redes wifi ilegales y El Paquete.
En las últimas horas el mandatario cubano también ha acaparado la atención mediática tras ser captado bailando casino con su esposa Lis Cuesta.
El presidente de la mayor de las Antillas ya fue noticia por un hecho similar en la Iglesia Riverside (Harlem), donde se puso a tocar un tambor junto a un grupo de músicos.
Precisamente en aquel encuentro fueron expulsados varios periodistas del centro religioso cuando pretendían dar cobertura al evento.
En la ciudad neoyorquina, Miguel Díaz-Canel ha vivido intensas jornadas durante el desarrollo de la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde ha proclamado un ideario continuista de Fidel y Raúl Castro.
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