En medio del miedo de los padres y de la obediencia forzada, niños cubanos de entre seis y 11 años se convierten en los protagonistas del juramento de los "Pioneros José Martí".
Este acto, que se realiza cada año por el aniversario al natalicio de Ernesto "Che" Guevara, constituye un ejemplo del adoctrinamiento que se vive en las aulas del país, según se constató en las imágenes grabadas por Cubanet.
Los menores repiten consignas en las que se comprometen a ser "dignos relevos de la Unión de Jóvenes Comunistas" (UJC). Los progenitores reconocen que desconocen el contenido de estos juramentos. "No sé explicarte", "no sé decirte", son algunos de los comentarios.
Hay otras voces que, entre el temor y el silencio, reconocen que los niños "todavía no están preparados, pero se les va educando para eso".
Para estos padres el temor pesa más que la calidad educativa, a pesar del evidente adoctrinamiento. Para ellos es complicado oponerse a esta situación, que anula la libertad de los pequeños para elegir una inclinación política.
La imágenes de niños vestidos con el uniforme de pioneros representan un nuevo ejemplo del control que ejerce el gobierno cubano sobre la educación del país.
El pasado mes de enero cientos de niños en edad preescolar ya colmaron las calles de la occidental provincia de Mayabeque para homenajear a Martí con pancartas de Fidel Castro y la UJC.
Un acto masivo que volvió a escenificar el adoctrinamiento al que se ven expuestos los niños cubanos desde edades tempranas.
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