El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cargó con el dirigente español Mariano Rajoy al que avisó que se "le reventarán los dientes si se mete con el país chavista".
Estas declaraciones llegaron después de que Rajoy se sumara a Donald Trump y pidiera en Twitter la liberación del disidente Leopoldo López.
En su intervención durante un congreso celebrado con la juventud chavista se refirió al presidente de España como "bandido" y "protector de delincuentes y asesinos".
La respuesta del Ministerio español de Exteriores no se hizo esperar y llegó este viernes convocando al embajador de Venezuela en España, Mario Isea, para expresar el malestar por las palabras de Maduro.
La diplomacia española traslado a Isea el malestar por el lenguaje "ofensivo, inaceptable e injusto".
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