Beryl tocó tierra a última hora de la madrugada de este viernes por Quintana Roo, en la península de Yucatán, México, y lo hizo como un huracán de categoría dos.
El huracán impactó por el noreste de Tulum con ráfagas de viento de hasta 175 km/h.
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El Centro Nacional de Huracanes informó que a las 7:00 a.m. Beryl se encontraba a unos 25 km al noroeste de Tulum, México, y a 1,175 km al este-sureste de Brownsville, Texas.
Los vientos máximos sostenidos han disminuido a aproximadamente 160 km/h, con ráfagas más fuertes, y se está moviendo hacia el oeste-noroeste a una velocidad de 24 km/h.
Los estados de la península mexicana de Yucatán habilitaron cientos de refugios, evacuaron pequeñas poblaciones costeras, cerraron escuelas y cancelaron vuelos, según reveló Univision.
Unos 8,500 soldados y agentes del gobierno fueron desplegados en la zona ante la emergencia.
En Yucatán ya han comenzado a sentirse los efectos de Beryl, según confirman videos publicados en redes sociales.
La prensa local mexicana indicó que Protección Civil lanzó desde hace unas horas la Alerta Roja para casi todo el estado.
Se espera que Beryl continúe moviéndose hacia el oeste-noroeste, cruzando el norte de la península de Yucatán hoy y emergiendo sobre el suroeste del Golfo de México esta noche.
Posteriormente, se desplazará hacia el noroeste, acercándose al noreste de México y el sur de Texas al final del fin de semana. Se anticipa un debilitamiento adicional a medida que el huracán avanza sobre tierra firme hoy, seguido de una posible reintensificación al regresar al Golfo de México.
Tras su devastador paso por el Caribe, Beryl dejó al menos nueve muertos en Granada, Venezuela, Jamaica y San Vicente y las Granadinas.
Beryl es un inusual fenómeno, que pasó de ser tormenta tropical a huracán de categoría cuatro en un tiempo récord.
También es el primero que alcanzó la categoría cinco en el Atlántico en una fecha tan temprana del año, lo que está provocado por la alta temperatura de las aguas del océano.
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