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El cubano de 52 años David de Jesús Contreras, acusado de disparar mortalmente contra su hijo de 21 años en el área de Kendall en noviembre pasado, compareció este jueves ante un tribunal donde sus abogados solicitaron que sea liberado bajo fianza.
El hombre, de 52 años, está acusado de asesinato en segundo grado por la muerte el pasado 3 de noviembre de su hijo Eric Contreras, estudiante de la Universidad de Florida.
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Durante la vista, conocida como audiencia Arthur, el padre lloró y se derrumbó al escuchar la llamada al 911 que hizo tras disparar a su hijo en la cabeza.
En la llamada se le escucha decir: "¿Qué he hecho? Estaba peleando con mi hijo... perdí la cabeza, él no paraba".
La audiencia Arthur es similar a un pequeño juicio rápido que podría terminar concediendo la libertad bajo fianza a Contreras, explicó el canal NBC News.
Antes del crimen la familia había viajado a Orlando para visitar Disney, pero Eric comenzó a actuar de forma diferente y por ello él y su padre regresaron a su casa de Kendall.
El día del hecho una pelea entre ambos se intensificó hasta terminar en el fatal desenlace.
Según un informe de arresto, David Contreras disparó a su hijo varias veces "por razones desconocidas" y luego llamó a la policía y les dijo que había disparado a su hijo, quien fue declarado muerto en el lugar.
El joven de 21 años era estudiante de la Florida International University y graduado de la Christopher Columbus High School.
Sufría problemas de salud mental, estaba bajo tratamiento, y según un reporte del canal Telemundo 51 esto habría tenido que ver con el trágico hecho.
La defensa aseguró en diciembre que el acusado estaba muy deprimido, por lo que le pedirían al juez que considere liberarlo bajo fianza a pesar de que está acusado de un delito grave.
Según las autoridades, fue el propio padre quien realizó la llamada al 911 para reportar la muerte de su hijo.
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