Una terrible imagen del fondo marino en la playa de Bacuranao, en La Habana, ha causado impacto e indignación entre cubanos: el lugar es un cementerio de latas de bebidas lanzadas al agua por los bañistas.
La foto fue publicada por Leo Koffe, fotógrafo y activista voluntario en OASIS Limpiemos el mar, una organización no gubernamental cubana para la conservación del medio ambiente, integrada por voluntarios que limpian los fondos marinos y trabajan para crear una conciencia medioambiental.
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“Bienvenidos a Bacuranao. Bienvenidos a las playas y costas de Cuba”, escribió Koffe en el post, que han comentado decenas de personas.
En los comentarios, un joven le pregunta si es “¿Bucanerao?”, en alusión a la cerveza cubana Bucanero, y Koffe le responde jugando con el nombre de la playa: “Basuranao”.
Ellos y otros internautas coincidieron en que las causas de ese desastre son la falta de cultura de cuidado del medio ambiente y la irresponsabilidad ciudadana y estatal.
Koffe y otros activistas de OASIS comentaron que el lugar se ha limpiado en varios fines de semana, durante la temporada vacacional, sin embargo, la escena que muestra la fotografía da a entender la magnitud del problema, la total falta de conciencia en la población sobre las consecuencias de echar basura al mar y la ausencia de acciones del gobierno para contrarrestarlo.
Algunas opiniones hicieron referencia a que las autoridades prohibieron la presencia de perros en la playa, sin embargo, no han hecho nada para impedir que las personas desechen las latas de bebidas en el agua, con el consiguiente daño ambiental.
Una usuaria afirmó que “la indisciplina social ha desarrollado unos tentáculos demasiado fuertes y el trabajo de recuperación y limpieza tiene que ser tomado mucho más en serio y sustentado en decretos aplicables con fuerza legal, no se va a solucionar con el trabajo de Grupos de limpieza y por trabajo voluntario”.
Otro comentó que “Santa Fe también está llena de latas y basura” y afirmó: “Los fondos marinos y playas más sucios que he visto son en Cuba”.
El perfil de @unguajirocubano en la red social X (antes Twitter) publicó una captura del post de Koffe, y la acompañó con videos grabados en Trinidad, antes de la pandemia de COVID-19. Las imágenes muestran a activistas limpiando los fondos de la playa Ancón, también “infestados” de latas y otros desechos.
“Bacuranao hoy es un cementerio de latas, miles de ellas descansando en el fondo, a metros de la orilla; asqueroso, somos una enfermedad. Los otros dos videos fueron en Trinidad antes la pandemia; un grupo de amigos y yo habíamos ido a Ancón a labores de limpieza”, explica el hilo de tuits.
“Llévense su basura de regreso. También el Estado debería priorizar en invertir en contenedores de basura y reciclaje en playas y parques naturales, no es una recomendación, es una responsabilidad ecológica-ambiental. Sumémosle la indisciplina social que no ayuda. Conciencia, cubano”, exhortó el post.
En julio, un cubano denunció la suciedad en la playa de Guanabo, al este de La Habana, convertida prácticamente en un vertedero, llena de latas, potes de plástico vacíos, palos y bolsas de nailon.
Ciudadanos denunciaron en junio pasado un vertimiento de mieles residuales que realizó la empresa estatal Cuba Ron (antigua fábrica Arechabala) en Playa Larga, en el municipio matancero de Cárdenas.
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