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Decenas de policías armados atacaron este jueves la residencia privada del primer ministro de Haití, Ariel Henry, en respuesta a la indiferencia gubernamental ante la muerte de varios agentes durante el ejercicio de sus funciones.
El ataque a la casa del mandatario en Puerto Príncipe ocurrió mientras Henry regresaba de Argentina, donde se celebró esta semana la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
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Medios locales reportaron daños considerables a la vivienda, fuertes disparos y varios vehículos con los cristales rotos.
La policía haitiana encabeza un movimiento de protesta para reclamar al gobierno mayor protección. Solo este mes casi una docena de efectivos han perdido la vida en enfrentamientos con los peligrosos grupos armados que operan en el país.
Después de atacar la casa del primer ministro, los manifestantes se dirigieron al aeropuerto Toussaint Louverture para esperar a que su avión procedente de Buenos Aires aterrizara.
Allí levantaron barricadas y quemaron neumáticos. El tráfico estaba paralizado por la protesta de policías que esperaban la llegada del mandatario.
El periodista del diario español El País Jacobo García publicó imágenes en Twitter y afirmó: "Haití un poco más cerca del colapso. Acaban de arrasar con las tiendas del aeropuerto de Puerto Príncipe y los aviones están saliendo de emergencia y sin pasajeros. Al caos político se suma el hambre y la falta de combustible".
La tensión se ha disparado en el sector luego de que siete policías fueran asesinados hace algunas horas por grupos armados en Savien, en el departamento haitiano de Artibonite.
Al menos una docena de efectivos han perdido la vida en las últimas dos semanas, y el pasado año fueron asesinados 55.
Estas muertes ocurren en medio de un creciente clima de inseguridad que se agravó tras el magnicidio en julio de 2021 del entonces presidente Jovenel Moïse.
El país está dominado por los ataques armados y bandas dedicadas al secuestro, el robo y las violaciones.
El 20 de enero de 2022 el gobierno cubano informó que dos ciudadanos de la isla que permanecían secuestrados en Puerto Príncipe por estos grupos habían sido liberados. Se trató de Andrid Alfredo Abad y Enides Galano, dos trabajadores de la compañía Autoplaza, ubicada en la capital haitiana.
En horas de la tarde de ese mismo día, el régimen confirmó un nuevo secuestro ocurrido el 13 de enero, el de la doctora Daymara Helen Pérez Alabedra, quien fue liberada 10 días después.
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