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El director general de RTV Comercial, Joel Ortega Quinteiro, está siendo investigado por presuntos delitos de malversación y tráfico de influencias, según indicaron a CiberCuba varias fuentes del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).
De acuerdo con un trabajador del ICRT, contratado en varias ocasiones por RTV Comercial, el encargado de la mayor empresa estatal cubana de producción y comercialización de películas y programas televisivos “está siendo investigado desde hace rato y podría estar detenido ahora mismo".
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“Ha habido tremendo explote, pero en eso no está metido solo el director. Llevan meses detrás de todos los jefes de la entidad. Las sospechas las ha despertado el mismo movimiento de dinero. La gente se ha preguntado siempre de dónde sale el dinero para algunas superproducciones que lleva a cabo RTV. Ahí las plantillas y los presupuestos inflados están a la orden del día”, refiere el joven.
Asimismo, otro profesional que trabaja para RTV Comercial asegura que de momento no les han suspendido los contratos. "Siguen demorándose mucho en pagar, pero eso siempre ha sido así. Lo cierto es que es la única empresa que le da un salario justo a los creadores porque ingresa cifras millonarias por la venta de nuestros contenidos en el exterior”.
“El problema ha sido grande”, confirma una periodista de la Televisión Cubana, que también prefiere permanecer en el anonimato. “En cada rincón del ICRT y en las conferencias de prensa la gente del sector no habla de otra cosa. Se dice que al director se le investiga por malos manejos de fondos, sobresueldos a empleados y el tener a toda su familia trabajando con él en los mejores puestos".
“Creo que es un proyecto demasiado grande como para que desaparezca. No obstante, un escándalo como éste no afectará la imagen de los productos audiovisuales que hacemos porque son de muy buena factura, pero sí puede acabar con la imagen de la empresa. Es difícil no tentarse y dejarse llevar cuando se maneja tanto dinero en un país como Cuba”, explica la comunicadora.
Desde que empezó a extenderse el uso de la televisión y el equipamiento digital en Cuba, hace alrededor de una década, RTV Comercial se convirtió en una mina de oro, ya que se encarga de recaudar divisas para producciones radiotelevisivas que el Estado no puede o no quiere asumir.
Si bien antes la empresa solo se concentraba en servicios de licenciamiento de obras audiovisuales, producción e importación de equipamiento, actualmente cubre diez perfiles de negocios que incluyen la producción de audiovisuales con ingresos propios y coproducciones con otras instituciones, la representación de artistas, técnicos y profesionales, y la inserción de publicidad.
A tenor con lo que destacaba Ortega Quinteiro a la prensa oficial cubana a fines de 2017: “Pasamos de ser una simple comercializadora de los programas del ICRT a aportarle al instituto nuevas producciones. Muchas aportaciones pasan no solo por el resultado y la calidad de la obra, sino también por aportaciones financieras, económicas. La mayoría de estas obras son financiadas por RTV Comercial. Después debemos lograr recuperar ese aporte monetario con la gestión de comercialización”.
Sin embargo, un trabajador de RTV Comercial afirma que llevan casi un año y medio en bancarrota. “Últimamente solo aceptábamos producir proyectos que entraran con una parte gorda del financiamiento porque no teníamos de dónde sacar dinero. Hace mucho que no éramos los patrocinadores fuertes".
“Estamos acostumbrados a contar con recursos que normalmente no pueden manejarse en la mayoría de las producciones nacionales que transmite la televisión en el país. Los mejores equipos, técnicos, operadores, actores, productores y directores del ICRT siempre han estado relacionados, de una u otra forma, con RTV Comercial”, reconoce el especialista.
Hasta el momento el ICRT no se ha pronunciado al respecto. “Por eso dejan que especulemos. Sabemos que nunca nos enteraremos de los resultados de la investigación, pero nos consta que el que venga atrás (de Ortega Quinteiro) hará lo mismo. La corrupción es un sistema de vida para el cubano”, concluye otra de las fuentes consultadas.
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