A pesar de las advertencias sobre los efectos potencialmente catastróficos del huracán Milton en Florida, especialmente en la ciudad de Tampa, la cubana Denise Díaz desoyó la orden de evacuación y permaneció junto a su familia para enfrentar una noche madrugada que describió como “monstruosa”.
En un video que compartió en TikTok, Díaz (@denisediaz017) narró en tiempo real la intensidad de la tormenta, dejando entrever su miedo y sorpresa por la magnitud del huracán.
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“El viento está soplando súper fuerte, no voy a poder hacer ningún video en vivo”, dijo al comenzar su testimonio.
“Dios mío, no se puede estar afuera, esto es aterrorizante”, añadió, mientras describía los peligros que acechaban fuera de su hogar.
Visiblemente afectada por la fuerza del huracán, Díaz continuó: “El viento está sonando, parece que lo que hay afuera es un fantasma... yo nunca había escuchado una cosa así, esto es horrible”.
A medida que la tormenta se intensificaba, su preocupación crecía por sus hijos: “Estoy en un área segura, en el área más segura de mi casa. Aquí están los niños”.
Aunque agradeció que aún contaban con electricidad en su hogar, señaló que la luz se había ido dos veces, generando más incertidumbre.
En otro video, la joven madre ofreció una descripción de los efectos del huracán, la cual fue cada vez más dramática: “Ya se voló el techo del Tropicana Field, las cercas están volando, se cayó una grúa, esto ha sido terrible”.
La fuerza del viento y las inundaciones la dejaron sin palabras: “Esto es un monstruo. Que Dios nos proteja, que Dios proteja Tampa, nuestras familias y hogares”.
En una tercera publicación, la cubana reiteró la gravedad de la situación: “No va a quedar nada... nunca había visto una cosa igual, esto es un monstruo”.
El huracán Milton a su paso por Florida dejó una fuerte estela de daños y varios fallecidos.
Además de inundaciones, Milton dejó una gran cantidad de destrozos provocados no solo por sus vientos, sino también por los 19 tornados confirmados, nueve de ellos en el sur de la Florida, que antecedieron a la entrada misma del fenómeno en tierra.
En Tampa, por ejemplo, el huracán Milton arrasó con el techo del estadio de los Tampa Bay Rays, que se suponía serviría de refugio para miles de evacuados y trabajadores de emergencia.
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