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El joven alpinista cubano Yandy Núñez Martínez anunció oficialmente en sus redes sociales que se prepara para escalar el monte Everest, uno de los retos mayores de cualquier montañista a nivel mundial.
"Es tiempo de representar a mi país, Cuba, por todo lo alto y llevarlo siempre a las alturas más altas de este mundo", escribió Núñez este martes en su cuenta de Facebook.
"Es hora de hacer realidad mi sueño de convertirme en el primer cubano en conquistar la cima más alta del mundo: 8848 m", agregó el escalador.
"Represento a mi gente a mi pueblo y a mis cubanos, a los 11 millones. A la nación de Islandia también la represento ya que la llevo muy adentro de mi corazón. Viva Cuba Libre. Patria y Vida y Libertad", agregó el cubano.
Desde enero del 2020, tras conquistar la cima del Aconcagua en sólo cinco días, el alpinista cubano había anunciado su intención de subir al más famoso de los llamados "ochomiles". "Ningún cubano ha tenido la dicha de llegar hasta la cima del mundo: el Everest", explicó entonces.
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"Para mí sería el mayor logro que pueda alcanzar un cubano viviendo en libertad, soñando con una Cuba libre, plantando la bandera de la Isla en lo más alto de este mundo", declaró.
Otro cubano, el médico José Antonio Soto, recientemente fallecido, alcanzó fama en 2016 tras escalar los 5643 metros de altura del Monte Kala Pattar, a los pies del Everest, donde recitó los Versos Sencillos de José Martí y cantó el Himno Nacional de Cuba.
El 25 de diciembre del 2019, Núñez llegó a la cima de la montaña más alta de América, situada en Argentina.
Tres meses antes, Núñez Martínez también había hecho historia tras alcanzar la cima del monte Elbrús, el pico más elevado de Europa, con una altitud de 5 642 metros. Antes ya había subido otros picos famosos, como el Hvannadalshnjúkur, el Mont Blanc, el Iztaccíhuatl y el Orizaba.
Nuñez, que tiene ahora 33 años, vive en Islandia, donde aprendió todo lo que sabe sobre montañas. Con lo que gana en su trabajo de pescador y pintor de barcos en los mares del hemisferio Norte, se ha dedicado a su carrera de alpinista.
Nació en Calabazar, La Habana. En Cuba conoció a Halldora, quien hoy es su mujer, de nacionalidad islandesa. Con ella vive en esta otra isla europea desde hace seis años. La pareja tiene un hijo pequeño, Yngvi Yandyson, al que Núñez dedicó su subida al Aconcagua por ser su cumpleaños.
“Mi ascenso al Aconcagua fue en 5 días. Pero desde el campo base de Plaza de Mulas hasta la cumbre fueron 2 días”, contó el escalador a la revista de alpinismo Cumbres. “Venía aclimatado y con una preparación estupenda gracias al tiempo que estuve en México porque allá entrené mucho”.
La experiencia en el Aconcagua le sirvió para darse cuenta de cómo reacciona su cuerpo a una altura de más de 6.500 metros. “Me di cuenta que tomar agua constantemente es lo que te da el oxígeno que necesitas para que puedas respirar mejor. Estaba casi seca la montaña. En Mulas cogíamos agua de los estanques. Después en los campamentos tuvimos que derretir nieve, pero era escasa”.
Yandy caminó por encima de los 6.500 metros monitoreando en su reloj Garmin constantemente frecuencia cardíaca y presión. Su plan era mantenerse siempre en 110. Si se pasaba a más de 120 paraba, respiraba y trataba de seguir con paso lento pero continuó, sin detenerse.
“Tienes que de verdad tener una preparación y concentración y algo que te motive para seguir adelante. Adentro sientes que buscas tu cumbre”.
Esa difícil experiencia en el Aconcagua le ha servido para aspirar a su escala mayor: “El Everest, mi gran anhelo. Creo que en Everest andaré bien, y voy por eso”.
Hasta ahora, el cubano ha costeado todas sus expediciones de su propio bolsillo, incluidos los viajes y el equipamiento completo de montaña. Esta vez, para conseguir hacer realidad su sueño, el cubano ha lanzado una campaña en Gofundme.
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