“No podíamos creer lo que estábamos viendo”, dice a CiberCuba el autor de la filmación. Él y sus familiares se encontraban en ese momento en el Piano Bar del "Gran Hotel Manzana Kempinski", ubicado en el segundo piso del edificio.
“Cuando escuchamos la algarabía en "La Moderna Poesía" nos dimos cuenta de que algo pasaba con la policía y por puro instinto comencé a filmar. No tenía idea de lo que íbamos a presenciar”.
El video tiene dos minutos veintitrés segundos de duración, durante los cuales se distingue a tres policías cubanos arrestando a dos individuos en el paseo Obispo, exactamente frente a la entrada de la librería "La Moderna Poesía".
Las causas de los arrestos se desconocen, pero sí puede apreciarse como los policías caminan con los detenidos, ambos esposados, por los frentes del Floridita hasta cruzar al Museo de Bellas Artes, en su edificio de Arte Universal. Una vez allí, en el amplio portal y protegidos -creían ellos- por la intimidad de las enormes columnas de concreto, los policías desataron su naturaleza salvaje.
“Ya desde antes de entrar al portal puedes ver que en la misma acera uno de los arrestados va casi sin poder caminar por la posición en que lo llevan esposado, y resbala y se cae. ¡Pues el policía que lo lleva lo que hace es darle una patada, como a un animal!”, nos dice el autor del video.
En efecto, la primera agresión directa se produce sin que el detenido mostrara señal alguna de resistencia al arresto. Simplemente pierde el equilibrio y cae de rodillas.
Cuando finalmente juntan a los dos individuos en una columna que hace esquina, se puede ver a otro policía amenazando a uno de los dos, que se encuentra esposado y en el piso. En el audio, se puede escuchar a quienes filman decir “Qué descarados, los meten detrás de la columna para que la gente no los vea”.
Sin embargo, lo peor estaba por llegar.
Segundos más tarde los policías quitan las esposas a uno de los dos detenidos y cuando este parece confrontarlo verbalmente, sin un solo ademán de violencia, el policía le pega un golpe brutal en pleno rostro. Un puñetazo a bocajarro que desmayó a la víctima.
Quienes filmaban no podían ocultar el espanto.
“Nosotros estábamos en shock, sabíamos que estábamos viendo una barbaridad y que este video en algún momento querríamos que saliera a la luz”.
Los segundos siguientes muestran el grado de deshumanización de los agentes de la Policía Nacional Revolucionara: en lugar de preocuparse por el estado del hombre, evidentemente inconsciente, lo toman de un brazo y lo arrastran hasta dejarlo más acostado todavía en el suelo. La escena es de un desprecio aberrante por la vida de un ciudadano, a manos de supuestos agentes del orden cubano.
El autor del video nos pide anonimato: “Tengo a mi familia allá, honestamente me preocuparían las represalias que tuvieran que sufrir por yo denunciar a estos hijos de mala madre”, nos dice desde Miami, donde reside.
El incidente tuvo lugar a mediados del pasado enero durante una de sus visitas a la isla.
Aunque no se supo el motivo del arresto y menos aún del trato tan violento por parte de la policía, vecinos de esta turística y concurrida área habanera nos dicen que incidentes similares se producen todo el tiempo con vendedores ambulantes o personas que intentan atraer desde allí a turistas para sus casas de renta o sus paladares.
“Eso lo vi yo mil veces cuando vivía allá”, dice a CiberCuba Annia Consuegra, quien residió a pocos minutos de allí antes de salir de Cuba rumbo a Houston, Texas, el pasado verano. “La policía es super agresiva en Obispo y en estas zonas donde abrieron el Hotel Gran Manzana Kempinski, quieren tener todo bajo control absoluto y les molesta que los mendigos o vendedores “empañen” la vista a los turistas que llegan. Esos policías desprecian a los cubanos”.
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