Vídeos relacionados:
El congresista estadounidense Mario Díaz-Balart criticó enérgicamente las políticas de acercamiento hacia el gobierno cubano en un reciente tuit, prometiendo un cambio en la postura de Estados Unidos.
Su mensaje surge tras la publicación de un informe de ADN Cuba sobre el fallecimiento de Inoel Rodríguez Rodríguez, un joven recluso en Cienfuegos, quien, según denuncias de su familia, murió en la prisión de Ariza luego de recibir una golpiza presuntamente ordenada por autoridades del penal.
Lo más leído hoy:
“Es horroroso el informe desde Cuba sobre este joven que fue torturado y asesinado simplemente por decir ‘Patria y Vida’. Sus torturadores deben rendir cuentas y se debe restablecer fuertes sanciones contra el régimen que abusa, encarcela y busca destruir a quienes se atreven a alzar la voz en su contra”, dijo el congresista cubanoamericano en X.
Haciendo énfasis en la necesidad de una política exterior más dura hacia la isla, Díaz-Balart reprochó a la administración del presidente Joe Biden las políticas encaminadas a apaciguar al régimen totalitario que impera en la Isla desde hace más de 60 años.
“Los días de apaciguamiento que envalentonaron a nuestros adversarios bajo la Administración Biden-Harris están contados. Pronto iniciaremos una nueva etapa que pondrá fin a la política de concesiones de esta Administración”, alertó el congresista.
El caso de Inoel fue reportado por su madre, Yanet Rodríguez, quien narró en ADN Cuba los eventos previos a su muerte. Según su testimonio, el joven de 27 años fue golpeado por al menos siete guardias tras un altercado en prisión.
Pese a los intentos de la familia de verlo tras la golpiza, no pudieron acceder a él, y posteriormente se les informó que Rodríguez había fallecido bajo custodia. La versión oficial indicó que se había suicidado, pero los familiares cuestionan esta explicación debido al estado en que fue visto por última vez y por el historial de violencia reportado en la prisión.
El caso despertó preocupación y denuncia de activistas y organizaciones de derechos humanos, quienes señalaron un patrón de violencia en la prisión de Ariza, donde otras muertes de reclusos se han documentado recientemente.
El artículo de ADN Cuba apuntó que las golpizas en la prisión de Ariza son perpetradas frecuentemente por un grupo de guardias conocido entre los prisioneros como “El Escuadrón de la Muerte”, liderado supuestamente por el mayor Maykel Medina Terry.
Díaz-Balart, uno de los críticos más persistentes de la administración Biden respecto a su política hacia Cuba, señaló que el periodo de concesiones y “apaciguamiento” hacia el régimen cubano “están contados” y anticipó una nueva fase en la relación entre ambos países.
Para el congresista, poner fin a las políticas de acercamiento significa proteger a quienes alzan la voz en Cuba y exigir consecuencias para los responsables de abusos.
Esta declaración cobra relevancia en un contexto en el que el senador cubanoamericano Marco Rubio ha sido mencionado como posible candidato a Secretario de Estado en una administración republicana.
Rubio ha defendido una política de presión y sanciones al gobierno cubano, postura que coincide con las afirmaciones de Díaz-Balart y podría definir la relación futura entre EE.UU. y Cuba en temas de derechos humanos y justicia.
Archivado en: