Este artículo es de hace 7 años
Bajo la dirección del ruso Valeri Guérguiev, la música clásica hizo resonar las ruinas de la histórica ciudad de Palmira en Siria, destruida por los extremistas del Estado Islámico.
Los terrorsitas fueron expulsados completamente de la ciudad Patrimonio de la Humanidad por la ofensiva imparable del Ejército Sirio el pasado 27 de marzo.
El histórico concierto se ofreció en el Teatro Romano de la ciudad de Palmira y el maestro Guérguiev estuvo acompañado por la Orquesta Sinfónica del teatro Mariinski de San Petersburgo.
A continuación RT repasa las barbaridades que ha soportado Palmira e intenta contestar a una pregunta de gran importancia ¿Es posible reparar el daño causado?
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