La Habana es una de las siete ciudades Maravilla del Mundo Moderno, así lo creen los cien millones de personas de todo el mundo que votaron y consideraron que el patrimonio humano que encierra la urbe le merecía este galardón y, por tanto, representa para la civilización urbana del planeta.
Y sí, los que viven en la capital de Cuba perciben la maravilla en su arquitectura, urbanismo, cultura, contrastes, en la creatividad, ingenio, humor, luchas, tribulaciones y trajines cotidianos de su gente y ese espíritu peculiar habanero, solo desentrañable por quien es parte de ella.
Pero el reconocimiento mundial y el orgullo que este provoca no aplacan el dolor de verla deteriorarse exponencialmente y de observar, una detrás de otra, esparcidas por toda la ciudad, imágenes ante las cuales es imposible no sentir lástima y que empiezan por la expresión de tristeza que se multiplica en el rostro del habanero común.
En todos los barrios existen estampas deprimentes, pero estas que seleccionamos seguro te resultarán verdaderamente lamentables.
1. La Calzada del Monte, o Monte (Máximo Gómez es su nombre oficial que nadie usa). Se extiende desde la esquina de tejas hasta la calle Egido. Muestra un paisaje desolador a ambos lados de exteriores sucios, descoloridos, salideros de aguas albañales, hedor, establecimientos mal surtidos, algunos con portales apuntalados, edificios destruidos y un tráfico que incluye numerosos ómnibus colectivos muy concurridos que le asegurará mucho más destrucción.
Una realidad totalmente contraria a lo que un día fue: una de las calles más prósperas y hermosamente decoradas a iluminadas de la ciudad.
2. La calle Belascoaín (Padre Varela). Un paisaje tan triste como el que exhibe Monte, solo que con más edificios derrumbados y en vías de desplomarse a cada lado. Si en su época de gloria el slogan radial que la describía era el de “La Calle que tiene de todo” hoy debería ser “la que no tendrá nada”. También es muy transitada.
3. La Calzada del Diez de Octubre. Una de las de mayor circulación de La Habana y también de las más deprimentes. El panorama muy semejante al de las dos anteriores. Muchos edificios que fueron establecimientos comerciales, hoy se convirtieron en solares (lugares donde varias familias viven hacinadas), portales desplomados, edificios colapsados convertidos en baños públicos, Cines de barrio que son también vertederos. Para echarse a llorar.
4. Lo que queda del Hotel Isla de Cuba en la calle Monte. Muy conocido, hermoso y bien ubicado en su tiempo. Por la fachada y estructura interior se nota que fue un edificio hecho con deseos. Hoy crecen árboles en sus columnas y arquitrabes y también es un baño público improvisado. La esperanza de que se recupere aún no muere, puesto que está cercado a la usanza de los edificios que serán reconstruido por la Oficina del Historiador de la Ciudad.
5. La imagen de la calle San Lázaro desde Belascoaín hasta Prado. Tienes que caminar con cuidado, mirando con temor hacia arriba, por los numerosos edificios que parece que se derrumbarán en cualquier momento, mientras observas las ruinas de muchos otros. En la imagen de la cabecera.
6. La tienda Fin de Siglo. Apuntalada, sin aire acondicionado, donde se ha hacinado a los artesanos y es casi imposible moverse sin chocar con otras personas y con la mercancía en exhibición. Oprime el pecho ver en lo que ha degenerado.
7. El deterioro del Edificio de antigua Compañía de Teléfonos, situado en Zanja y Dragones. Su belleza es sobrecogedora, a pesar de que en sus paredes descarnadas se ven los ladrillos. Realmente lastima y preocupa que vaya a correr el mismo destino que su vecino contiguo, el otrora Hotel New York, del que solo queda suciedad y desolación.
8. La criminal profanación de la Fuente del Hotel Nacional de mosaicos de talavera de la reina, que era el principal atractivo que te recibía en el patio del emblemático hotel y cautivaba con su belleza; donde se retrataron figuras de renombre mundial. Todos los pequeños mosaicos que formaban las bellísimas figuras de colores que vestían la fuente fueron arrancados, desechados y sustituidos por mosaicos ordinarios. Es algo sencillamente imperdonable.
9. El Teatro Campoamor ubicado en San José e Industrias, Centro Habana, hoy totalmente destruido.
10. El actual estado del Monumento a José Miguel Gómez en la Avenida de los Presidentes, maltratado diariamente y convertido en baño público.
11. Estado actual del Edificio Retiro Médico, en la Rampa, donde radica el Ministerio de Salud Pública. Despintado y destruido. Su apariencia es deplorables cuando se le compara con las edificaciones que lo rodean. Antes albergaba a la famosa tienda Indochina.
12. La imagen de las carnicerías de barrio.
13. La imagen de lo que quedó del Restaurant Moscú tras el incendio.
14. Las aceras destruidas y las calles plagadas de baches.
15. Los ancianos y personas discapacitadas con expresión de desamparo vendiendo jabas de nylon, cigarros y en la calle.
16. Los discapacitados o mutilados con sus prótesis puestas a un lado y pidiendo limosna en las calles.
Hay otras más, demasiadas, por eso te agradecemos que si recuerdas alguna la dejes en los comentarios.
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