"No me hables en un idioma extranjero, estúpida vaca fea", grita un hombre blanco a una mujer negra de 77 años en un vuelo de la compañía Ryanair, que cubría la ruta Barcelona-Londres.
El vídeo donde el hombre le advierte a la señora: "si no te vas a otro asiento, yo te empujaré hacia otro asiento", ha causado indignación en las redes sociales, por la decisión del personal de vuelo, que tuvo lugar el pasado viernes, de mover a la mujer en lugar de expulsar al hombre.
El pasajero que captó el incidente racista, David Lawrence, narró a la BBC el momento. "Todo estaba en calma, nos estábamos preparando para despegar. Y luego un hombre subió a bordo y llegó a su asiento, habló con dureza a una mujer sentada en el asiento del pasillo. Era muy ruidoso y muy agresivo. Comenzó a gritarle a la mujer y le dijo "quítate del camino", "mueve los pies", "no deberías estar sentada aquí". Empujó a la mujer y se dirigió a su asiento (con el) intercambio más desagradable de insultos raciales y de lenguaje grosero".
"Ese hombre debió haber sido bajado del vuelo", "Espero que Ryanair le prohíba volar por el resto de su vida" y "en shock porque Ryanair no haya hecho nada", son algunos de los comentarios de indignación que han seguido al post de Lawrence compartido en Facebook.
La señora de origen jamaicano viajaba junto a su hija. Según algunos medios presenta problemas de movilidad porque padece de artritis.
La compañía Ryanair, por su parte, ha declarado brevemente en Twitter que son conscientes del vídeo y lo han reportado a la policía de Essex, donde aterrizó el avión.
El Ministro de Transporte de Reino Unido, Karl Turner, ha prometido a un ciudadano británico que denunciará el caso para que las compañías aéreas dejen de ignorar estas situaciones de racismo.
Las denuncias a los casos de racismo y xenofobia se han elevado en los últimos años en las redes sociales tanto en Europa como en Estados Unidos.
Hace una semana un hombre negro en Missouri, EE UU, subió un vídeo donde se ve a una vecina blanca impidiendo la entrada a su casa en un lujoso loft de la localidad de St. Lois. "Esta mujer trata de evitar que ingrese a mi edificio porque se siente insegura, porque no siente que yo pertenezca; nunca pensé que esto me pasaría a mí... 30 minutos después, la policía llamó a mi puerta ¡porque ella llamó!”, dijo D’Arreion Toles en Facebook.
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