"Las condiciones carcelarias de los, por lo menos, 130 presos políticos en Cuba son deplorables", ha dicho este martes el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, durante la presentación de la campaña Jailed for What?, (¿Presos por qué? en español) en una comisión de las Naciones Unidas en Nueva York, donde los ponentes hablaron sobre la represión y opresión del Gobierno de Cuba, pese a la interrupción constante de la delegación diplomática cubana en la ONU y asociaciones de amistad con el país.
Tanto Almagro, como los otros ponentes, se refirieron a las faltas de libertades en Cuba. "El régimen ha promulgado leyes penales que definen aspectos tales como resistencia, ataque, sedición, desorden público e incluso el absurdo cargo de peligrosidad social predelictiva con la finalidad de poder usarlos prácticamente en cualquier circunstancia para silenciar a los críticos con una justificación mínima o sin justificación alguna y encarcelar a los presos políticos", dijo el secretario de la OEA.
Sin embargo, desde la cancillería afirmaron este martes que en el país no existen presos políticos desde 1959.
El representante del organismo regional se refirió, además, a algunos presos políticos cubanos como el doctor Eduardo Cardet Concepción, coordinador del Movimiento Cristiano de Liberación, quien desde el 30 de noviembre de 2016 está detenido por hacer declaraciones críticas sobre Fidel Castro en la radio poco después del fallecimiento del dictador.
"Las autoridades cubanas no le permitieron a su hermana participar en las audiencias de la OEA y le impidieron que abordara un avión en La Habana para evitar que los activistas cubanos recurran al Sistema Interamericano y Universal de Protección de los Derechos Humanos", agregó.
"En Cuba no se ha realizado ninguna mejora con respecto a las violaciones de los derechos humanos", afirmó Almagro, quien aludió también a Blanca Reyes, una de las fundadoras de las Damas de Blanco, quien en una audiencia de la OEA, habló acerca de la represión contra ellas y su familia y denunció concretamente los casos de cinco miembros, que se encuentran actualmente en la cárcel por su activismo: Marta Sánchez González, Nieves Caridad Matamoros González, Aimara Nieto Muñoz, Yolanda Santos y Xiomara de las Mercedes Cruz.
En su intervención, el secretario general de la OEA afirmó también que "el sistema de represión y encarcelamiento usado durante años por Cuba" ha sido exportado a Venezuela y Nicaragua.
"Los cubanos están trabajando arduamente para mantener el régimen de Maduro en el poder en un momento en que los venezolanos están viviendo la mayor crisis humanitaria que el continente ha sufrido en el lapso de nuestras vidas", añadió en este sentido.
"Últimamente hemos visto el modelo cubano de represión y opresión exportado a Nicaragua con las mismas formas de abuso, represión, asesinato y tortura", agregó Almagro. La OEA cuenta con el testimonio jurado de un estudiante que fue víctima de la represión del Gobierno de Daniel Ortega por ayudar a los jóvenes que protestaban en la Universidad. El nicaragüense, que asegura haber sido torturado por el régimen con golpizas, asfixias simuladas, y violación con un objeto contundente, identificó como cubano al dirigente del centro en donde fue detenido.
"No hay duda que la existencia de presos políticos en un país determinado es un indicio determinante que existe una dictadura en el Gobierno. El uso de la represión y la opresión es inaceptable, moralmente equivocado e ilegal de acuerdo con el derecho internacional que rige los derechos humanos", sentenció Luis Almagro, quien pidió a la comunidad internacional exigir la liberación de los 130 presos políticos cubanos y los más de 400 en Venezuela.
Poco después el uruguayo escribió en su cuenta oficial de Twitter junto al vídeo de sus palabras en la ONU: "La historia no absolverá jamás crímenes de lesa humanidad" en alusión al alegato de autodefensa de Fidel Castro, donde pronunció la tan conocida frase "La historia me absolverá", que justamente este 16 de octubre cumplía 65 años de ser proferida en Santiago de Cuba.
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