El actor Alexis Valdés fue el más reciente invitado a Cara a Cala, el show semanal de entrevistas que el presentador cubano Ismael Cala transmite en YouTube.
El creador e intérprete de Cristinito recordó una época de su vida en que empezó a padecer de una depresión endógena (sin causa aparente) y su madre decidió llevarlo a consultar un babalawo.
“Yo no podía ni dormir, pensaba que me iba a morir, porque tenía una tristeza muy profunda”, recordó.
El religioso, que vivía en una casa muy humilde, le dijo al verlo: “Bandurria, estás jodío. Yo estoy mejor que tú”.
El babalawo hizo una especie de comparación entre una persona y una mesa.
“Una mesa tiene cuatro patas. Una pata es el trabajo; otra, la familia; la otra, el amor y la otra la salud”, le explicó, antes de preguntarle al artista por cada una de sus “patas”.
“¿Cómo está tu relación de pareja?”, inquirió.
“Ahora mismo no tengo”, respondió Alexis.
“Quita una pata”, le dijo su anfitrión. Y entonces indagó: “¿Y la familia, cómo te llevas con tus padres?”. A lo que el humorista le contó de una reciente discusión con su papá.
“Quita otra pata. ¿Cómo está la salud?”, preguntó, y al saber de los problemas que sufría el artista: le ordenó: “Quita otra pata”. Solo en el trabajo las cosas marchaban bien.
“Eso es una pata, y una mesa con una pata no se aguanta. Tienes que ponerle las otras”, sentenció el babalawo, quien luego le hizo una ceremonia a Alexis y le dio a probar un plato con harina, quimbombó y sangre de tortuga.
El popular humorista revela que ese encuentro fue definitorio en su vida.
“Llegué a mi casa y esa noche no sé qué me pasó, que me fui para a una fiesta, me ligué una novia y bailé como un loco. A partir de ahí todo empezó a mejorar. Desde ese momento, tengo una fe no fanática en la religión yoruba”.
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