El Madison Square Garden de Nueva York fue testigo el pasado miércoles de una tierna escena protagonizada por Pavel Buchnévich, jugador ruso de los New York Rangers, de la Liga Nacional de Hockey (NHL), y un joven admirador.
El deportista se acercó un momento al cristal que separa a los jugadores del público, y por encima le pasó su palo. El chico lo agarró emocionado y comenzó a llorar.
El pequeño, nombrado Benjamin, llevaba un jersey con el antiguo emblema KHL de Buchnevich. Y es que antes de debutar en Estados Unidos, éste integró durante cuatro años el equipo ruso Cherepovets Severstal de la Liga Continental de Hockey (KHL), en su ciudad natal.
“Soy titular de boletos de temporada para los Rangers. Mi abuelo lo ha sido durante mucho tiempo. Estoy usando esta camiseta esta noche porque él me la consiguió en un sitio web ruso”, explicó.
“Estaba junto al cristal y todos me saludan. Luego veo a Buchnevich, que me guiña un ojo y dice: 'Guau, esa es una muy buena camiseta', y luego habla con Vlad Namestnikov, porque ambos son rusos, como diciendo: ‘Wow, mira a este niño’.
“Un segundo después: boom. Buchnevich viene y me da el palo sobre el vidrio y estoy llorando. Soy un gran fan de los Rangers, así que es realmente emocionante”, concluyó.
Según Benjamin, Buchnevich es un gran jugador, que se convertirá en una de las grandes estrellas y ayudará a los Rangers. Por lo pronto, el equipo ganó con marcadores de 4-3 ante los Pittsburgh Penguins. Una noche feliz para todos.
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