Estados Unidos anunció este martes la puesta en marcha del primer vuelo con migrantes arrestados en territorio estadounidense hacia el centro de detención situado en la Base Militar de Guantánamo, en Cuba.
"El presidente Trump no pierde el tiempo", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en declaraciones a la cadena Fox News.
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Un funcionario reveló a Reuters bajo condición de anonimato que el vuelo transportaría casi una docena de migrantes.
El vuelo se adelantó bastante a lo anunciado por Tom Homan, el llamado "zar de la frontera", quien dijo que las deportaciones a Guantánamo se iniciarían en 30 días y que probablemente empezarían con un número pequeño de deportados.
Por su parte, Leavitt aseguró este martes que el presidente Trump no permitirá que Estados Unidos se convierta en "un vertedero de criminales ilegales de países de todo el mundo" y recalcó que la nueva Administración cumple con sus promesas.
Subrayó que el centro de detención de la Base albergará a los "criminales ilegales que han violado las leyes migratorias" de Estados Unidos y que además "han cometido más crímenes atroces contra ciudadanos estadounidenses".
El objetivo de Trump es que el campo de detención de Guantánamo aloje a unas 30,000 personas.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ha dicho que el plan no era retenerlas en Guantánamo indefinidamente y que se respetaría la ley estadounidense.
El Departamento de Seguridad Nacional no ha aclarado si se enviarán mujeres, niños o familias inmigrantes.
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