En un contexto marcado por graves apagones en Cuba, el director de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE), Alfredo López Valdés, propuso a los ciudadanos de la isla que consideren la compra de paneles solares como una alternativa para independizarse del sistema eléctrico nacional.
Sus declaraciones, en una accidentada comparecencia televisiva el jueves junto al primer ministro Manuel Marrero Cruz, han generado un intenso debate en la población, que además se enfrenta a una de las mayores inflaciones del mundo, a bajos salarios y a los altos precios que se imponen desde el propio Estado.
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Durante su intervención, el directivo afirmó que la idea es estimular a la población a optar por sistemas fotovoltaicos en lugar de depender de plantas eléctricas, sugiriendo que la inversión en energía solar podría resultar beneficiosa para los hogares del país, que este mismo viernes tuvo un apagón masivo en todo el territorio nacional.
"Se está promoviendo la idea de que en vez de comprar una planta eléctrica la población pueda adquirir un sistema solar fotovoltaico que les permita obtener autonomía energética", dijo López Valdés.
"Es mucho mejor para el país y para la gente pueda tener un sistemita fotovoltaico, en lugar de invertir en un grupo electrógeno", añadió el dirigente.
Sin embargo, ante las críticas de la población, la UNE se apresuró a aclarar que las palabras de su director fueron malinterpretadas y que se trató de una "manipulación mediática".
La UNE subrayó que no hay un plan formal para la venta de paneles solares y que la situación energética del país es compleja y requiere de una solución integral.
La crisis energética ha afectado gravemente la vida diaria de los cubanos, que sufren apagones de más de 20 horas al día en algunos territorios.
Marrero Cruz, dijo en la misma comparecencia que la situación es extremadamente crítica, e indicó que no se espera una solución a corto plazo.
"Hay tres importantes factores que inciden en el déficit de generación eléctrica: el estado de la infraestructura, la falta de combustible y el incremento de la demanda", reconoció, aunque subrayó que la falta de combustible es el elemento más destacado de los tres.
El alto cargo dijo que como política han elegido priorizar el sector residencial y que se han ido “paralizando actividades económicas” para garantizar la generación energética a la población.
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