El sacerdote cubano Leandro NaunHung compartió una versión criolla del sampa en redes sociales, un alimento de larga duración que recomendó como una solución práctica ante la crisis económica y alimentaria que enfrenta el país.
NaunHung explicó en Facebook que el sampa (o tsampa) es “una comida a base de granos y semillas tostados, llena de energía para tiempos de crisis”.
Lo más leído hoy:
Además, apuntó que se emplea la miel de abeja como conservante natural, y aseguró que el sampa “puede durar más de 10 años sin estropearse”.
Por último, recomendó ese platillo porque es muy útil “para tiempos de escasez alimentaria”.
En el video compartido, NaunHung comenzó tostando los granos, utilizando en esta ocasión chícharos, y luego los pulverizó empleando un pilón tradicional de madera.
El siguiente paso consistió en cernir el polvo con un colador, descartando las partículas más gruesas y preservando el polvo más fino.
Posteriormente, agregó miel y formó pequeñas bolas con las manos. Indicó que no se consumen de inmediato, ya que primero deben secarse al sol antes de estar listas para comer.
NaunHung ha demostrado un profundo compromiso con las comunidades rurales de Santiago de Cuba, no solo como guía espiritual, sino también brindando apoyo práctico a las personas para enfrentar los desafíos cotidianos impuestos por la crisis.
El sacerdote católico ha encontrado una forma creativa de ayudar a su comunidad a generar ingresos adicionales: reciclando latas de aluminio.
A través de redes sociales, NaunHung compartió un video en el que anima a los residentes de zonas rurales a recoger latas vacías de cerveza y otros productos, como una forma de apoyar tanto a la parroquia como a sus propias familias.
También, recientemente repartió pan durante una misa dominical en una zona rural de Santiago de Cuba, destacando este gesto como una forma de compartir alegría y de resistir la dura realidad que enfrentan los cubanos.
En un video publicado en Facebook, expresó un mensaje de esperanza y solidaridad mientras repartía pan en una zona rural de Santiago de Cuba: “Le traemos un regalo, le traemos pan”, dijo el cura, destacando que, en medio de la crisis que afecta a tantas familias, compartir alimentos es una forma de traer alegría.
Archivado en: