La líder opositora María Corina Machado propuso una "transición negociada" del poder en Venezuela, ofreciendo garantías, salvoconductos e incentivos al gobernante Nicolás Maduro para que abandone el Palacio de Miraflores.
Machado, quien se mantiene en la clandestinidad por temor a su vida, respondió a un cuestionario de la AFP, destacando su certeza en la victoria de la oposición en las recientes elecciones y su denuncia de fraude.
La líder opositora se refirió a la posibilidad de entablar una "negociación para la transición democrática", que incluya “garantías, salvoconductos e incentivos para las partes involucradas, en este caso el régimen que fue derrotado en esa elección presidencial”.
“Estamos decididos a avanzar en una negociación”, insistió la dirigente de 56 años. “Será un proceso de transición complejo, delicado, en el cual vamos a unir a toda la nación”.
Las declaraciones de Machado se producen luego de conocerse la hipotética oferta de Estados Unidos a Maduro de un acuerdo con amplias garantías para su persona con tal de que este acepte su derrota e inicie un proceso de transición pacífica a la democracia en Venezuela.
Según el prestigioso medio británico The Economist, que consultó a fuentes anónimas, la administración Biden estaría dispuesta a ofrecer el dictador venezolano “lo que Maduro quiera” con tal de que detenga la represión sobre opositores y manifestantes, presente de forma transparente las actas que avalan el resultado de las pasadas elecciones, y reconozca la voluntad de cambio del pueblo venezolano.
Tras unas elecciones denunciadas como fraudulentas por la oposición, organismos internacionales, observadores y varios gobiernos, el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro como vencedor con un 52% de los votos, pero se negó a publicar los detalles del escrutinio, alegando que el sistema fue hackeado.
La oposición, por su parte, aseguró que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó con un 67% de los votos, presentando como prueba un sitio web con copias de más del 80% de las actas escaneadas. Por su parte, el gobierno de Maduro desestimó estas pruebas, calificándolas de forjadas, y solicitó a la corte suprema que "certifique" los comicios, un proceso que la oposición y varios académicos consideran improcedente.
Machado, quien asumió el liderazgo de la oposición tras arrasar en las primarias de octubre, expresó su orgullo por la resistencia de la sociedad venezolana frente a lo que calificó como "la elección más desigual y arbitraria" en la historia del país. A pesar de estar inhabilitada políticamente, Machado ha sido el cerebro detrás de la campaña opositora, trabajando de cerca con González Urrutia.
La reelección de Maduro ha sido cuestionada por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina, que insisten en la necesidad de un escrutinio detallado. Machado ha llamado a la comunidad internacional a reconocer la victoria de González Urrutia y a presionar a Maduro para que acepte una transición negociada. "Las fuerzas internacionales son corresponsables de lo que ocurre en Venezuela", declaró Machado, insistiendo en que es el momento de que los gobiernos del mundo eleven su voz en contra de la represión en Venezuela.
En respuesta al resultado electoral, estallaron protestas en el país, dejando al menos 24 muertos y más de 2.200 detenidos, según cifras oficiales. Machado, sin embargo, se mantiene firme en su convicción de que la verdad prevalecerá y que el 10 de enero de 2025, Edmundo González Urrutia asumirá la presidencia de Venezuela.
“Somos un equipo, un bloque indisoluble”, dijo Machado a AFP sobre su relación con González Urrutia. "Todos los venezolanos temimos por nuestra libertad y por nuestra vida, todos", confesó. "Y estoy indignada con esta reacción brutal del régimen, pero estoy también serena y segura de que vamos a hacer valer la soberanía popular y que la verdad va a prevalecer".
Asimismo, desestimó la declaración de "lealtad absoluta" a Maduro del alto mando militar, al asegurar que muchos militares encargados de la custodia de centros de votación apoyaron la recolección de actas para su sitio web.
"A Maduro lo único que le queda en este momento es atrincherarse alrededor de la generación de violencia y miedo, por una parte, y de un grupo muy reducido de militares de alto rango que no representan la aspiración de la inmensa mayoría de nuestras Fuerza Armada Nacional", sostuvo.
"Estoy absolutamente convencida que la inmensa mayoría de los ciudadanos militares, así como de los cuerpos policiales, anhelan un cambio a una Venezuela donde exista justicia, oportunidades y libertad", insistió. "El 10 de enero (de 2025, día de la toma de posesión), Venezuela tendrá en González Urrutia su nuevo presidente y su nuevo comandante en jefe".
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