El huracán Debby tocó tierra sobre las 7 de la mañana (hora local) de este lunes en Steinhatchee, una pequeña comunidad en el condado de Taylor, en la costa noroeste de Florida.
En el momento en que impactó el territorio del estado, Debby tenía vientos máximos sostenidos de unos 130 km/h.
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El fenómeno se desplaza hacia el noreste con lentitud, a unos 17 km/h, según informó el Centro Nacional de Huracanes en su boletín más reciente.
Aunque el huracán tocó tierra en una de las zonas menos pobladas de Florida, los meteorólogos advierten que las fuertes lluvias asociadas al fenómeno podrían provocar inundaciones catastróficas no solo en Florida, sino también en los estados de Carolina del Sur y Georgia.
El NHC advierte de inundaciones catastróficas y marejadas ciclónicas potencialmente mortales mientras el fenómeno avanza lentamente por la parte norte del estado antes de estancarse en las regiones costeras de Georgia y Carolina del Sur.
Una alerta de tornado también estaba vigente para zonas de Florida y Georgia este lunes.
Casi 214,000 clientes se quedaron sin electricidad en Florida el lunes por la mañana, según PowerOutage.com.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, declaró el estado de emergencia y movilizó a la Guardia Nacional para ayudar en las operaciones de evacuación y rescate.
Los equipos de emergencia están en alerta máxima, y se han establecido refugios para aquellos que necesiten abandonar sus hogares hacia zonas más segura.
Las comunidades en la trayectoria del huracán Debby están siendo instadas a mantenerse informadas a través de los medios de comunicación y las actualizaciones del NHC.
La región escasamente poblada del Big Bend, en el Panhandle de Florida, también fue golpeada el año pasado por el huracán Idalia, que tocó tierra como un categoría 3.
Debby es el segundo huracán de la temporada de huracanes atlánticos de 2024, después de que el Beryl azotara Texas el mes pasado.
Normalmente, el segundo huracán no suele formarse antes el 26 de agosto, por lo que la temporada ciclónica 2024 sigue el intenso ritmo pronosticado por los modelos meteorológicos.
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