Vídeos relacionados:
Eduardo Alberto Vera Rosales, un joven de 29 años que se encontraba en paradero desconocido desde la tarde del lunes en La Habana, ya fue localizado.
"Ya apareció, con el favor de Dios con vida. Ya está en su casa. Gracias a todo el que compartió", escribió en redes la creadora digital Isol G, quien se había hecho eco en redes de la petición de ayuda.
Lo más leído hoy:
Ni Isol G. ni otros grupos de Facebook que han dado cuenta de la localización del joven han ofrecido otros detalles sobre las circunstancias en que fue encontrado.
"Cuidado con la juventud. Sabemos la maldad y represión de la dictadura, pero en Cuba hay otras peligros graves también. Madres, no se despreocupen de sus hijos. Están en constante peligro por las drogas y otros males", advirtió una comentarista en uno de esos grupos.
"Gracias a Dios, ¿pero dónde estaba? ¿Por qué se pierden y aparecen? ¿Qué está pasando? Es bueno saber", apuntó otra internauta en referencia a una tendencia en aumento: jóvenes de ambos sexos que desaparecen durante unos días y luego son localizados con vida, pero nunca llega a saberse en qué estado ni tampoco las causas de sus desapariciones.
Los reportes de desapariciones de cubanos son cada vez más frecuentes en los últimos meses, así como la publicación de peticiones de ayuda en redes sociales para obtener información, ello en medio de un contexto de creciente violencia en el país.
Sin embargo, muchos cubanos comienzan a quejarse que los familiares recurren a las redes en busca de ayuda y una vez que sus seres queridos han aparecido sanos y salvos, ni tan siquiera actualizan que ya aparecieron y que están bien, más allá de que se reserven, con todo su derecho, detalles sobre las circunstancias en que aparecieron o lo motivos por los que estuvieron ilocalizables.
"Es que luego aparecen y ni actualizan. No es justo porque uno es humano y se identifica con los casos y se preocupa", se quejaba una internauta en uno de los tantísimos grupos donde de forma solidaria se publican de forma recurrente solicitudes de información sobre el paradero de personas.
En el caso de Eduardo Alberto Vera Rosales, cuando se pidió ayuda para localizarlo, trascendió que reside en Calabazar, en el municipio Boyeros y que es padre de dos niñas pequeñas.
Una publicación del portal La Tijera precisó que salió de su casa en la mañana del lunes y que la última vez que se supo de él fue cogiendo una guagua de la ruta 177 rumbo a Alta Habana.
Archivado en: