La discóbola cubana Yaimé Pérez logró el pasado sábado un impresionante lanzamiento de 73,09 metros, que lo ubica como el más largo del mundo desde 1989, en la reunión atlética de la Serie de Lanzamientos de Oklahoma en Ramona, condado de San Diego, en Estados Unidos.
Pérez, quien dejó sus vínculos con el deporte cubano en 2022 y se estableció en el país estadounidense, no solo superó la barrera de los 70 metros por primera vez, sino que llegó tres metros más allá de esa marca.
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La secuencia de sus lanzamientos fue iniciada con una falta, pero la campeona mundial de Doha 2019 lanzó, en la segunda oportunidad, su disco a 71,96 metros, rompiendo su marca anterior de 69,39 metros, establecida el propio 2019.
En la tercera ronda, el disco fue a parar más lejos y con marca ganadora, hasta los 73,09 metros. Los demás lanzamientos fueron de 69,13 metros y 71,50 metros, antes de culminar con un fallo.
De 32 años, la bronce olímpico en Tokio 2020, rompió en esta ocasión el récord norteamericano de Valarie Allman de 71,46 metros y ahora sube al décimo lugar en la lista mundial de todos los tiempos.
Pérez, quien fue la principal figura que llevó Cuba al Campeonato Mundial de Atletismo en la ciudad estadounidense de Eugene, Oregón, celebrado en agosto de 2022, abandonó la delegación poco antes de regresar a la Isla.
La prensa oficialista cubana, aunque intentando minimizar el impacto de esta fuga, dijo que era considerada una “grave indisciplina”.
En su primera competencia en Estados Unidos, celebrada en abril del pasado año, “La Rusa”, como también se le conoce a Yaimé, obtuvo el tercer lugar en el torneo de campo y pista realizado en el estadio Tritón, en La Jolla, California, con 66,97 metros.
En la competencia anual de California, únicamente para atletas que reciben invitación, la cubana logró tal registro en su sexto lanzamiento, luego de iniciar la prueba con 64,81 metros. Los siguientes intentos fueron de 64,12 m, 66,12 m, 66,76 m y una falta.
Ese mismo año, pero en junio, la deportista ganó el Grand Prix de Nueva York, en el Ichan Stadium, con 67,44 metros, con la que supone su mejor marca en los últimos dos años.
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