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El Gobierno cubano responsabilizó este sábado a la madre de un bebé de seis meses recientemente fallecida en La Habana del trágico desenlace, por "ignorar las indicaciones médicas".
El perfil en Facebook a nombre de "Elizabeth Ferrer" –vocera gubernamental– afirmó que "las autoridades sanitarias no son responsables de esta tragedia, ya que el personal médico actuó con prontitud al brindarle atención inmediata y al valorar la gravedad del mismo remite al pequeño al Hospital Pediátrico de Centro Habana para recibir atención especializada".
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"Sin embargo, la madre del bebé decidió retirarse y llevarlo de regreso a casa, ignorando las indicaciones médicas", expresa la publicación, que anexa un documento con la recomendación de ingreso.
La madre del niño aseguró en declaraciones a ADN Cuba que nunca le entregaron esa remisión, y que cuando el niño estuvo en el pediátrico de Centro Habana no se cumplía con el horario de los medicamentos, pues al pequeño había que ponerle una dosis de rocephin a las 6:00 pm y se la fueron a poner a las 09:00 pm.
El perfil oficialista afirma que "la responsabilidad recae en la falta de colaboración y conciencia de quienes tienen en sus manos la salud y el bienestar de los más pequeños" y asegura que es "esencial resaltar que la tragedia se debió a la negativa de la madre a seguir las indicaciones médicas" y "no a la falta de acción por parte de las autoridades sanitarias".
La víspera trascendió el caso de este bebé fallecido a consecuencia de un paro respiratorio.
Magaly Sánchez, madre del bebé, estalló de indignación en las inmediaciones del policlínico Tomás Romay, en La Habana Vieja, y denunció presunta negligencia médica en ese centro hospitalario.
Afirmó que tuvo que llevarse al niño para la casa a darle salbutamol y darle oxígeno porque en el policlínico solo le dieron dos gotas de un medicamento que el menor ni siquiera ingirió correctamente.
Un video publicado en redes sociales por el medio independiente ADN mostró a un grupo de familiares concentrados en los alrededores del policlínico tras el trágico desenlace del menor.
La joven, visiblemente alterada, dijo que ella fue mal atendida desde que estaba embarazada y que no era la primera vez que tenía problemas con la atención sanitaria a su pequeño hijo.
Asimismo denunció que en el policlínico la amenazaron con acusarla de negligencia por supuestamente no cumplir con las orientaciones de los doctores.
Según detalló la mujer –en medio de una marcada exaltación– al bebé le habrían aplicado una dosis excesiva de rocephin, un antibiótico usado para combatir infecciones bacterianas.
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