Unos pescadores en Nassau, Bahamas, rescataron a un bebé tiburón que agonizaba intentando salir de una bolsa de plástico, en la orilla de una playa.
La persona que descubrió al tiburón hizo la operación de rescate del animal perfectamente. Sacó la bolsa del mar con un gancho, la retiró y sujetó al bebé tiburón por detrás de las branquias, asegurándose de no cortar su respiración y evitando acercarse a la boca para no ser mordido.
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La cola no habría sido una buena zona para sostener al tiburón pues es muy flexible y escurridiza. Luego de retirar la bolsa de plástico, el pescador devolvió al pequeño escualo rápidamente al agua. Tuvo contacto muy limitado con el animal.
Este bebé tiburón es de la especie conocida como nodriza o gato. Habita en los fondos marinos, llega a medir hasta 4 metros de largo. El bebé tiburón tuvo la suerte de encontrar a la persona correcta en el momento indicado.
El video fue compartido por el perfil de Instagram Fly Fishing Nassau a finales de noviembre y acumula hasta la actualidad cerca de 500 mil visualizaciones.
Aunque parezca increíble en el siglo XXI, hubo personas que reaccionaron en contra de la liberación de este tiburón y también quienes criticaron la acción de los pescadores.
Sin embargo, la mayoría de los comentarios a la publicación destacan el derecho que tienen estos animales a vivir en su hábitat natural, a ser respetados como cualquier otra especie; y la responsabilidad de los seres humanos de proteger el ecosistema marino.
Hace pocos días fue viral otro video con un tiburón como protagonista. La historia es completamente distinta y tuvo lugar en Cuba.
Las imágenes son sobrecogedoras y muestran a un grupo de jóvenes que capturaron a un escualo vivo. Hicieron una arriesgada maniobra luchando cuerpo a cuerpo para subir al enorme animal a la embarcación con el plan de comérselo o vender su carne, cuando llegaran a tierra firme.
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