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Después de varios días sin pan y en medio de la crisis energética que ha obligado al gobierno a paralizar un número considerable de servicios en el país, la producción de este alimento que se distribuye de forma racionada a la población parece recibir un respiro en Cienfuegos.
Magalys Torres Abreu, directora de la Empresa provincial de la Industria Alimenticia, aseguró al diario oficial 5 de Septiembre que en el Molino de Trigo de Cienfuegos disponen de la materia prima para su procesamiento, y que “una vez que esté disponible la harina, se procederá a su traslado a las panaderías para reiniciar la elaboración y venta del demandado alimento” por la canasta básica normada.
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Las declaraciones de la funcionaria se producen luego de “la situación de tener tres días sin pan” y de hacerse “una venta liberada no al alcance de toda la población”, con una harina que se tuvo que “gestionar en Mipymes”. El pan de 200 gramos fue vendido a 60 pesos por la Empresa Cubana del Pan, el cual -aclaró- no será “el pan que se va a establecer como de venta normal a la población”.
Los convenios entre las Mipymes y el gobierno cubano no resultan un hecho aislado. En Sancti Spíritus, la estatal Cadena Cubana del Pan anunció la creación de convenios de trabajo o cooperación con algunas de estas empresas para que estas suministraran la harina y la estatal pudiera producir el pan que se vendería en las panaderías.
Desde hace meses el país presenta una situación crítica en la producción y comercialización del pan. En junio pasado los cubanos dejaron de disfrutar del demandado alimento, como consecuencia de un desabastecimiento que escaló hasta un punto crítico.
Entre las medidas tomadas por el régimen ha estado la disminución de los gramos establecidos. En septiembre, las familias de Ciego de Ávila comenzaron a recibir un pan normado de solo 50 gramos de peso, en lugar de los 80 gramos acostumbrados.
Mientras, en Sancti Spíritus -ante el déficit de combustible, las afectaciones con el servicio eléctrico y la falta de materias primas- la Empresa Provincial de la Industria Alimentaria restó 20 gramos a la ración de pan que recibe la población por la libreta de abastecimiento.
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