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Un joven cubano de 18 años, identificado como Brayan Califa y quien se desempeñaba como entrenador de Tenis de Mesa, murió asesinado la noche del viernes en el municipio Bejucal La Habana, denunciaron amigos y familiares.
En declaraciones a CiberCuba la prima de la víctima, Jenniffer Vigil Aldama, contó que el hecho ocurrió en la noche del viernes cuando Califa –residente en Bejucal– y un grupo de amigos se dirigían a una piscina y al salir de la casa tropezaron con un hombre borracho que comenzó a ofenderlo.
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"Él iba para una piscina con los amigos y se topó a ese hombre que estaba borracho. Ellos nunca tuvieron problemas ni nada. Él dice a mi primo ¿qué tu miras? y se empezó a meter con el y mi tía le dijo no te metas con mi chamaco", explicó.
Tras esa discusión la madre de Califa le recomendó ir por otra calle menos oscura.
"Mi tía le dice a Brayan no te vayas por la oscuridad. Él se fue por la oscuridad con los amigos y ahí salió ese hombre y le dio una puñalada, que instantáneamente le partió un cartílago que comunicaba el corazón, el hígado y el pulmón", relató Vigil Aldama.
Aunque el joven fue trasladado de inmediato al policlínico de Bejucal falleció en la unidad asistencial.
El borracho también se apareció en el policlínico y fue detenido por la policía, comenta.
Califa y su prima habían sido deportistas y actualmente el joven se desempeñaba como entrenador de Tenis de Mesa.
La joven asegura que la familia ha quedado devastada con el inesperado desenlace que se suma a la creciente ola de violencia en la isla.
En un post de Facebook Vigil Aldama expresó que el dolor es "inmensamente brutal", y recordó que Califa era "mi hermano, mi mitad, mi tanque, mi sangre" y que le arrebataron la vida con "solo 18 añitos".
"Recuerdo todo lo que vivimos de niños y cuántas lágrimas soltamos juntos. Lo compartíamos todo: alegría, tristeza, llantos, risas. La vida no me dio hermanos, pero tú eras más que mi hermano. Éramos uno. Mi vida entera derribada en una noche, en una llamada. Te amo y te amaré por siempre, mi chiquito, la luz de mis ojos", subrayó en un emotivo post.
"Qué puedo decir, Brayan Califa, no tengo palabras para expresar lo que siento. Me llaman y me dan la noticia, y no lo creo; pienso que todo es un juego. No sé ni qué decir, no suelo publicar nada de estas cosas por aquí, pero es que tú fuiste alguien especial en mi vida, y siempre te voy a recordar. EPD, VUELA ALTO, MI MENOR. Nunca se me van a olvidar las palabras que me dijiste antier", publicó en Facebook la internauta Lisse Chavez.
Decenas de cubanos reaccionaron a la noticia y lamentaron la imparable ola de violencia que desangra a la sociedad cubana.
Recientemente trascendió que un asesinato entre abakuás cubanos había conmocionado la comunidad religiosa en La Habana, donde los miembros de esta comunidad hacen un llamado a no faltar a los reglamentos.
La víctima, identificada como Adrián Labrador y conocido como Macaruchi, habría sido asesinado por un hermano de la religión.
También falleció el joven cubano de 19 años Yasiel Bicet, tras varios días reportado de crítico a consecuencia de una puñalada.
De igual modo el joven cubano Yelian Rafael Díaz Flores, muerto a puñaladas en Ciego de Ávila el pasado 29 de septiembre, fue asesinado por otro joven tras una discusión.
Todos estos crímenes se inscriben en la creciente ola de violencia que sacude Cuba.
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