Las autopistas de Miami-Dade siguen dejando a diario material para el asombro y peligrosas conductas al volante.
Un video que se ha viralizado desde el perfil de Instagram Only in Dade muestra una insólita escena en la que, tras lo que parece ser un adelantamiento indebido, dos autos se empujaron mutualmente en mitad de la carretera y se desplazaron varios metros hasta que uno de ellos consiguió empujar al otro hasta sacarlo de la I-95 rumbo a la yerba a campo abierto.
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La extraña maniobra tuvo lugar en plena conducción nocturna y con el pavimento mojado por la lluvia, según revelan las imágenes.
"La gente aquí juega a los choques de coches", se puede leer en la descripción de las sorprendentes imágenes, pues ciertamente el episodio recuerda a las maniobras que hacen los niños en las atracciones infantiles de bumpers cars.
"Ese es un nivel defensivo-agresivo veterano de una interestatal", comentó jocoso un internauta a la vista del extraño incidente.
"La representación más precisa de los conductores de Miami", añadió otro; mientras que un tercero insistió en que "Miami tiene los peores conductores del país".
Y es que en los últimos meses las autopistas de Miami-Dade siguen dejando a diario escenas insólitas.
Hace pocas semanas la imagen de dos mujeres acostadas en un colchón colocado arriba del techo de un auto mientras el vehículo circulaba por una calle del condado, escandalizó a cientos de internautas que criticaron la peligrosa aventura.
Previamente, la imagen de un joven montado en una vespa de espaldas, sin casco y con los pies rozando el suelo por una carretera del condado, también se viralizó en redes sociales. En ese caso el pasajero iba con los brazos cruzados sin más sobre la cajuela posterior del vehículo, sin preocupación alguna al parecer por la temeridad de lo que estaba haciendo.
En junio, el video de un hombre circulando a toda velocidad por una autopista de Miami con dos mujeres montadas en su moto, una de ellas sentada en incómoda y peligrosa posición de frente al conductor, también desató decenas de reacciones, la mayoría coincidiendo en el auténtico disparate de tal aventura. Eso sí, en ese caso al menos los tres tenían casco puesto.
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