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Un niño cubano conmocionó al periodista y profesor José Luis Tan Estrada al pedirle dinero en la calle para comprar algo de comer.
Según relató el reportero en su muro de Facebook, el pequeño se llama Adrián y tiene apenas 10 años.
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José Luis estaba un día de esta semana, sobre las 3:00 pm, comprándole un refresco a su hermano, cuando de repente sintió que alguien le decía: "Señor, ¿puede regalarme cinco pesos para comer algo?".
"Era Adrián, quien no había almorzado aún", precisó.
El periodista le compró una merienda al niño y aprovechó para preguntarle por su vida.
"Sus ojos, con tal inocencia no mentían. Vive con su mamá y ocho hermanos. El papá está preso. La situación económica en casa es muy precaria, no me lo dijo, pude notarlo", detalló.
El joven comunicador asegura que estuvo dos días dudando si publicaba la historia o no, hasta que finalmente se decidió.
"Adrián tiene la misma edad de mi hermano. Adrián puede ser mi hermano. ¿Cuántas niños cómo Adrián habrán en estos lares?", cuestionó.
Por último, pidió ayuda material para el niño, que él se la hará llegar a su casa en Camagüey.
"Lo mismo un peso cubano que un dólar, un short de uso o un jabón de la bodega. No duden en escribirme al privado", demandó.
Cada vez se ven más casos en Cuba de niños viviendo en la extrema pobreza, muchos en familias disfuncionales o con problemas de convivencia, y algunos hasta pidiendo limosnas o trabajando para ganar algo de dinero.
El mes pasado, una mujer pidió ayuda para una niña que encontró durmiendo en una calle del municipio Playa, en La Habana.
Dracarys Biatches compartió en Facebook la foto de una adolescente de unos 12 o 13 años, descalza y acostada sobre una acera durmiendo, y pidió a sus amigos y conocidos que compartieran la imagen para ver si alguien la identificaba.
"Está ahí desde anoche. La policía fue informada y está de camino, pero no sabemos cuánto tarde. Necesitamos urgente localizar familia. Se me parte el alma viendo esto", dijo.
La joven aclaró que una amiga suya estaba acompañando a la niña en el lugar, pero que debía irse ya y la policía seguía sin llegar.
En mayo, el opositor Silverio Portal denunció que un niño sobrevive pidiendo limosnas en una calle de La Habana sin que a ninguna autoridad competente le importe.
En un video posteado en Facebook, el activista mostró al menor durmiendo profundamente en un portal de Centro Habana, junto a un cesto en el que había algunas monedas.
Semanas antes, trascendió el caso de un niño que recoge materias primas para sobrevivir en Santiago de Cuba.
El menor de unos 10 o 11 años recorre las calles, coge los desechos y luego los vende a una empresa estatal para conseguir algo de dinero.
Un video compartido en Twitter por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) permitió verlo, con un palo sobre su espalda con el que carga dos sacos llenos, mientras recogía con dificultad dos cajas de cartón vacías. Después se fue caminando.
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