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El cadáver de un hombre debió ser trasladado hacia la funeraria en un camión ante la escasez de carros fúnebres en el municipio Mella, Santiago de Cuba.
Activistas de la isla denunciaron que los familiares del difunto esperaron cuatro horas por un coche fúnebre que lo trasladara del hospital hacia la funeraria, y finalmente debieron gestionar un camión.
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El internauta Librado Linares explicó en Twitter que el hecho ocurrió en el municipio Mella, donde no hay actualmente carros en servicio.
Dijo también que la caja fue confeccionada "malamente a última hora".
Un seguidor del activista comentó que en Cuba ya no se le puede dar a los muertos "cristiana sepultura". "Los dolientes no pueden ya ni llorar a sus muertos. Tienen que ponerse a gestionar carro, caja o hasta una fosa común. Damos pena", lamentó.
En marzo pasado un cubano denunció que, luego de una larga espera por un carro fúnebre en Santiago de Cuba, el esposo de su prima debió ser velado en su casa sin la certeza de cuándo sería trasladado al cementerio y sin saber dónde sería sepultado.
La Empresa de Servicios Comunales de ese territorio señaló que solo tiene 10 carros fúnebres para toda la provincia, seis menos de los que había hace un año.
La situación no es exclusiva de Santiago. En el municipio Banes, Holguín, convirtieron un tractor en carroza funeraria ante la falta de vehículos para ofrecer ese servicio en el territorio.
La crítica situación de los servicios fúnebres en Cuba no solo comprende la falta de carros para transportar los féretros sino que además tampoco hay espacio en las bóvedas para depositar los cadáveres, como sucede en la provincia de Artemisa.
También una familia debió empujar el carro fúnebre hasta el cementerio de Matanzas luego de que el vehículo se rompiera durante el sepelio. Las hijas del difunto gritaban indignadas ante ese hecho: "Papi tú no merecías esto".
A pesar de esta realidad, el régimen cubano inició el cobro de algunos servicios necrológicos, muchos de ellos ineludibles para los dolientes, como es el traslado interprovincial e intermunicipal de los difuntos.
Según la medida, informada por el diario Escambray de Sancti Spíritus, el gobierno no solo cobra la cremación de cadáveres y el traslado de fallecidos hasta otras provincias, sino que pondrá precio a algunas prestaciones, entre ellas, las relacionadas con los traslados de fallecidos entre municipios de una misma provincia.
Se prevé el cobro de los velorios en el domicilio, para el cual la funeraria prestaría los servicios relacionados con el velatorio y la familia pagaría sobre la base de la tarifa de precios aprobada y se habilitarán puntos de venta para ofertar guardarrestos, ánforas con mejor diseño y calidad para guardar las cenizas del fallecido en el crematorio.
Asimismo, se ofrecerán "otros tipos de ataúdes, de un mejor diseño, para quienes deseen y puedan adquirirlos, lo que no significa que el Estado deje de poner el que hasta hoy ha mantenido de forma gratuita", y "la venta de flores finas para el servicio de coronas a precios diferenciados", anunció esta semana el rotativo.
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