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El economista cubano Pedro Monreal afirmó este viernes que el excesivo control estatal sobre las ventas minoristas en el país genera el desabastecimiento generalizado y dispara la inflación.
"Los datos de las ventas minoristas de enero-marzo 2023 ratifican el agudo socavamiento del respaldo material de la moneda nacional y el mayor empobrecimiento de los hogares cubanos derivado de la contracción en casi un tercio en la demanda “real” del consumo", explicó en un hilo de Twitter.
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Afirma que esa devastación, reflejada por el hundimiento interanual de las ventas minoristas, se debe principalmente al impacto del sector estatal, que concentra aproximadamente 97% de las ventas de bienes y servicios del país en CUP. Eso sin contar mercados informales ni en MLC, detalló.
Según los datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) del total de ventas de bienes y servicios en el país, el 96.9 por ciento está en manos del Estado y solo un 3.1 por ciento en manos no estatales.
Para Monreal no existe, en ese contexto, evidencia alguna de que el enfoque oficial actual sea capaz de reducir los desequilibrios macroeconómicos que alimentan la alta inflación.
Señaló que los datos nominales ajustados a la inflación son desastrosos y la caída pudiera ser mayor, como son los estimados de Economist Intelligence Unit (EIU).
Al respecto, citó al colega Pavel Vidal, quien considera que "es la política fiscal la que debe buscar una solución lo antes posible", y "que el IPC oficial subestima entre cinco y seis veces la verdadera inflación".
Cuba registró una inflación anual cercana al 87% al cierre de mayo, según el registro que elabora el prestigioso economista estadounidense Steve H. Hanke, de la Universidad Johns Hopkins.
“El Paraíso Comunista de Cuba nunca FALLA en FALLAR. Hoy, medí la inflación anual de Cuba en un punitivo 86,66%/año”, escribió en Twitter el experto, quien incluyó una tabla del comportamiento de este índice en los últimos años.
En medio de ese caos se deteriora el poder adquisitivo y las condiciones de vida de los habitantes de la isla, donde se han incrementado los niveles de pobreza e indigencia.
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