Residentes en el municipio Cerro, en La Habana, denunciaron a un vecino que suelta una jauría de perros por la noche para matar gatos.
El hombre, identificado como Misael Tamayo, suelta a sus perros "entrenados para matar" por las noches para despedazar a los gatos callejeros que se encuentren en la barriada del Cerro, según la denuncia realizada en Facebook este lunes por la periodista Marianela Martín González.
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"Ayer a las 12 y 15 de la noche Misael Tamayo volvió a soltar sus perros en el barrio. Esta vez eran 9. Ese hombre es un sicópata. Ya fue advertido por autoridades de CENASA hace semanas. Conoce que en el barrio hay un grupo amplio de vecinos dando testimonio de sus desmanes y sigue violando el Decreto Ley de Bienestar Animal y haciendo padecer a quienes cuidamos y amamos a los animales", expuso.
En un video insertado por la internauta, se observa cómo varios perros descuartizan a un gato y luego lo arrastran por la calle.
El individuo identificado como Tamayo es "dueño de una jauría de perros entrenados para matar, pero lo que resulta inaudito es que este hombre ha sido denunciado en otras oportunidades y hasta multado por la alteración del orden, o como quieran llamar a esta barbarie, sin que hasta el momento estos actos hayan parado", exclamó otra periodista, indignada por la matanza perpetrada.
"Para nadie es un secreto que [para] un perro cuyo adiestramiento se basa en la agresividad y en asesinar para su alimentación no existe diferencia entre un gato o un niño, una mujer o un anciano, ellos solo responden al mandato del dueño, quien actúa sin escrúpulos y en dependencia de si tiene o no sustancias tóxicas en la sangre", expuso Elsie Carbó.
También señaló que la pasividad de las autoridades en estos casos no se corresponde con la pretendida persecución de delitos que atenten contra la dignidad humana.
"Urge que las autoridades investiguen y actúen en consecuencia para evitar males mayores en nuestras comunidades, ya de por sí estresadas por otros sinnúmeros de problemas de vida con los cuales se está conviviendo en la actualidad", advirtió.
Carbó confesó que incluso sufrió la agresividad de los perros cuando una madrugada se les enfrentó para quitarles a su gato, que estaba siendo destrozado frente a su casa, pero no pudo salvarlo.
A pesar de que el Decreto-Ley de Bienestar Animal lleva dos años en vigor, los animalistas cubanos se quejan de que los animales siguen siendo víctima de abandonos, abusos físicos y maltrato y las leyes no castigan con severidad a los agresores, por lo que exigieron a las autoridades aumentar las sanciones contra ellos.
Ciudadanos de varias partes de Cuba ven a sus mascotas amenazadas por individuos abusadores que comenten atrocidades contra los indefensos animales.
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