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El gobierno de Cuba promueve la llegada de turistas latinoamericanos al país en medio de una grave crisis de ese sector y en un intento desesperado por acercarse a la pretendida cifra de de 3.5 millones de visitantes internacionales en 2023.
En el balance anual del Ministerio del Turismo (MINTUR), las autoridades expusieron su intención de ampliar las acciones con turoperadores y compañías aéreas para atraer turistas de Ecuador, Perú, Argentina, Brasil, México, según trascendió en una nota del diario oficialista Granma.
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El principal "obstáculo" que identificaron en la afluencia de visitantes de América Latina a Cuba fue la deficiente conexión aérea pues "solamente vuela con regularidad, desde el cono sur, la aerolínea Copa Airlines, con limitadas operaciones semanales", afirmaron.
Aunque el gobierno ha reconocido la insuficiente conectividad aérea, impagos a proveedores que interrumpieron la cadena de suministros y dificultades para acceder al mercado internacional, como las problemáticas más graves en el área turística, no escatiman en gestiones para salvar el sector que solo llegó a un 15.6 % de ocupación hotelera durante 2022.
Para julio, pretenden iniciar un vuelo chárter entre la isla y Ecuador y dispusieron de tres turoperadores en el mercado de ese país para promover viajes a Cuba.
Con Perú "se ha venido gestionando el tema aerolínea" y con Argentina se han promocionado los vuelos de Cuba de Aviación que inician en mayo y los paquetes turísticos para Cayo Coco.
Para México el gobierno ya dispuso de nuevos operadores turísticos y evalúan "la factibilidad de aumentar las operaciones a la Isla" por parte de la aerolínea Aero México.
Sin embargo, Juan Carlos García Granda, ministro del Turismo, explicó ha sido muy difícil recuperar la afluencia de mexicanos hacia el país principalmente por los altos precios de los vuelos a Cuba.
En medio de la desesperación, también han ideado un "plan de trabajo" para Brasil, que incluye jornadas de presentaciones en ese país, con la presencia de los maestros roneros, para ofrecer los "atractivos turísticos" cubanos.
Aunque el régimen explora más formas para vender Cuba como destino turístico, las cifras siguen estando muy lejos de las metas iniciales.
Al cierre del 27 de marzo se habían recibido en el país 720,000 visitantes, que según el gobierno representa un cumplimiento de un 51 % en relación con 2019; y se ha cumplido solo el 70% de la previsión para los primeros meses del año.
Sin embargo, de mantenerse esa tendencia por trimestre, solo se alcanzarían al finalizar el año 2.8 millones de turistas, por debajo de sus estimaciones.
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