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Una cubana mostró su malestar en las redes sociales luego de verse obligada a esperar 13 horas por una ambulancia para trasladar a su padre con fractura de cadera.
En un post de Facebook, Kenia Toro relató que permanecía en el hospital Freyre de Andrade (Emergencia) de La Habana, con su padre con fractura de cadera, desde las 5 pm y hasta las 11:10 de la noche, esperando que apareciera una ambulancia que los trasladara al hospital ortopédico Fructuoso Rodríguez.
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“La única respuesta es que solamente hay una ambulancia trabajando para todos los casos en la Habana, quiero que alguien me explique qué mierda de potencia médica dicen que es esta, y pedí llevarlo en un carro por mi cuenta y la doctora no da la historia clínica porque sería bajo mi responsabilidad si hago eso, díganme que mierda de país está hecho Cuba, esa Cuba que tanto defiendo y llevo en mi sangre”, denunció Toro cerca de la madrugada de este miércoles.
En un post publicado en la mañana de este miércoles, Toro, que aún esperaba por una ambulancia para su padre, se mostró exaltada y, a la vez, desesperada.
“Y nos cogió el día en este lugar llamado “hospital”, 13 horas y no llega la ambulancia, ellos no tienen la culpa, los culpables somos nosotros por aguantar tanto tiempo un sistema que no sirve ni funciona para nada”, lamentó.
Hace apenas unas semanas, un cubano denunció que su hermano falleció luego de ser atropellado por un conductor que se dio a la fuga y tener que esperar 45 minutos por la llegada de una ambulancia.
Yasmany Scull Castellano, de 27 años y residente en el municipio habanero de El Cotorro, falleció luego de que la moto en la que viajaba con otra persona fuera impactada el pasado 11 de marzo en la Vía Monumental de La Habana, por otro vehículo cuyo chofer huyó del lugar sin prestarles auxilio.
“Lo socorrimos mi hermana y yo para el Hospital Militar Naval. Llegó vivo, pero por la tardanza de la ambulancia perdió mucha sangre y falleció. Y hoy todavía no han encontrado al culpable”, relató su hermano, a quien avisaron testigos del hecho y tuvo que trasladarse desde su residencia para socorrer a Yasmany.
En febrero, la anciana Carmen Leonides Botana Fernández, residente en La Habana, recibió ayuda de varios activistas cubanos que se interesaron por su caso, tras conocer que había esperado durante horas por una ambulancia que la trasladara al hospital.
A la señora, de 87 años, le diagnosticaron una deshidratación severa, escaras en su cuerpo y otras dolencias, por lo que estos jóvenes se movilizaron y buscaron insumos y medicinas para atender a la mujer, que ahora está ingresada en una institución sanitaria.
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